Boston, un alcalde digital para una ciudad tecnológica

Cada mañana, cuando llega a su despacho, el alcalde de Boston tiene ante sí dos pantallas que monitorizan al momento el pulso de la ciudad. Son dos teles de cuarenta pulgadas que recogen datos como la evolución de las llamadas al servicio de emergencias, el retraso de los autobuses de colegios, las reparaciones de la calzada, la limpieza de graffitis o el sentimiento de la ciudad a partir de tweets. ¿Control freak, vigilancia masiva del ciudadano, ‘Gran Hermano’ o simplemente uso de tecnologías para el bienestar de la ciudad?

La versión oficial se decanta por la última. El uso de estas tecnologías son «una herramienta más para que la administración municipal ofrezca un mejor servicio a la ciudad de Boston», declara el alcalde Martin Walsh que se estrenó en el cargo a principios de año.

El uso tecnológico en las alcaldías no es nada nuevo en los EE.UU. El precedente más significativo se dio en Nueva York que, bajo el mandato de Michael Bloomberg, creó un sistema similar para detectar problemas que, hasta ahora, se le escapaban a su administración. Bloomberg pudo tomar medidas para detectar las casas más susceptibles de incendios. En el caso de Walsh, también se ha seguido este ejemplo, así como para regular el tráfico.

Es curiosa esta implicación digital y tecnológica del nuevo alcalde de Boston en relación a su antecesor. Según relatan medios locales, su predecesor, Tomas Menino, pasó a la historia por no disponer de email o no tener ni un PC -o Mac- en su despacho durante los más de 20 años que estuvo al frente de Boston. Paradojas del primer mundo.

El caso es que Walsh ha decidido implicarse con la causa tecnológica empezando por su despacho. Además de las dos pantallas, el alcalde se ha mostrado accesible a nivel digital con turnos de preguntas con los ciudadanos a través de un ‘Ask me Anything’ en Reddit, dos chats ciudadanos en Twitter y un ‘Questions and Answers’ en Facebook. Y no le importa hacer un Vine para viralizar la cita con los suyos…

Fuente: El Mundo (06/05/2014)