En qué beneficia la ley de startups a los autónomos Los autónomos obtendrán bonificaciones de las cuotas y podrán disfrutar de una mayor agilidad administrativa.

La ley de startups contempla un régimen tributario especial para los nómadas digitales y una bonificación del 100% en las cuotas sociales a los trabajadores autónomos que tengan el control efectivo de una empresa emergente y trabajen simultáneamente para otro empleador.

Esta normativa, explican desde Declarando, supone una mejora fiscal tanto para trabajadores como para inversores, así como una mayor agilidad administrativa en lo que se refiere a la creación de este tipo de sociedades.

Los emprendedores que provengan del extranjero dispondrán, a su vez, de una tarifa para las rentas del ahorro y otra para el resto de las rentas. Una de las principales ventajas es que la base imponible general, es decir, la que incluye las rentas del trabajo o los alquileres tributa a un tipo casi fijo del 24%, hasta un máximo de 600.000 euros.

Bonificación de la cuota

Por otro lado, a los autónomos que de manera simultánea trabajen por cuenta ajena para otro empleador se les aplicará una bonificación del 100% de la cuota correspondiente a la base mínima establecida con carácter general en cada momento en el citado régimen especial durante los tres primeros años. Esta bonificación se disfrutará de forma continuada en tanto persista la situación de pluriactividad y, como máximo, durante los tres primeros años, a contar desde la fecha del alta.

Además de eso, las startups podrán, según la norma, utilizar hasta 50.000 euros anuales exentos de tributar para retribuir a sus empleados. A través de esta ley podrán utilizar hasta un 20% de sus acciones para la fórmula denominada «stock option»; es decir, retribuir con participaciones a sus empleados.