Turrones y Dulces, la empresa de productos navideños que quiere vender todo el año

Se trata de una tienda online de duces navideños con el objetivo de que el público pueda degustar los mejores productos durante todo el año, compatibilizando la tradición con las nuevas tecnologías.

Profesor y turronero por vocación, Fabián López Coloma ha unido la venta de un producto tradicional con las nuevas tecnologías, demostrando que para lanzarse a emprender no siempre hay que tratar con complejos sistemas de última generación, sino que es posible triunfar encontrando el nicho adecuado.

Así, a sus 34 años López Coloma afirma que «he conseguido disfrutar de mi día a día».

¿Cómo y cuando surgió el proyecto?

Vengo de familia turronera y he crecido en una fábrica de turrones y mazapanes. Estudié Ingeniería de Telecomunicaciones, y en temporada navideña, como no tenía beca, vendía turrones por los despachos y departamentos de la Universidad Politécnica de Valencia. También aprovechaba y visitaba establecimientos hosteleros, tiendas, etc.

Me pateé media Valencia. Todos aquellos fueron mis primeros clientes, allá por 1999, pero me quitaban mucho tiempo de gestión, y además, los catálogos eran caros, con lo que dejarlos para que no me compraran suponía bastante coste en el margen bruto final. Quería ayudar en casa, pero con una carrera tan técnica, llena de antenas y microondas, no sabía muy bien cómo hacerlo, no tenía ni ordenador. Un día en la sala de informática de la escuela de teleco descubrí el HTML y el email, y se abrió un mundo nuevo de posibilidades.

Hice el primer catálogo con una web estática en HTML y ya me sirvió para gestionarme mejor.

¿En qué ciudades se halla presente el proyecto? ¿Hasta dónde suele llegar?

Estamos en Jijona, la cuna del turrón, aunque vendemos turrones en todo el mundo, sobre todo en Europa.

¿Por qué se aventuró a crear su propia empresa?

En casa siempre hemos sido inquietos. Para la venta online de turrones me tuve que independizar y hacerme autónomo puesto que a nivel de gestión era mucho más rápido. Además, nadie confiaba en el proyecto ya que es un sector muy clásico. Me convertí en cliente de mis padres, aunque también conseguí independencia con otros proveedores.

¿Por qué se considera un emprendedor?

En mi opinión, todo el mundo es emprendedor, pero a nivel educativo creo que no se potencia demasiado esa faceta que todos tenemos dentro y, por lo tanto, perdemos mucho potencial conforme nos acomodamos. El ser humano es emprendedor desde el primer día que empezó a salir de caza para poder alimentarse.

Un emprendedor se dedica a perseguir un sueño que no tiene por qué ser profesional. Desde mi punto de vista, alguien que crea proyectos sin ánimo de lucro, o quien prepara un festival para los niños, es emprendedor. Lo que ocurre es que esta palabra, que parece que ha salido del diccionario en los últimos años, se suele asociar al mundo de las empresas de base tecnológica, y por eso se utiliza tanto en nuestro argot y en el de los empresarios y políticos.

¿Es fácil emprender en España?

El principal problema de emprender en España es que rozas la ilegalidad cuando intentas montar un proyecto. Tienes que pagar altas cuotas de autónomo cuando estás empezando y todavía no facturas. Se convierte en una odisea. Y lo peor de todo es que cuando estás en tus inicios, tienes muchísimos gastos que prácticamente no puedes atender o amortizar.

Si tienes la suerte de que las cosas vayan bien (suele ocurrir después de una larga «travesía por el desierto» de varios años) resulta que vuelves a tener unos enormes gastos de impuestos, recursos humanos, etc. que dificultan la marcha de la empresa. Si eres pyme o un autónomo/a lo tienes realmente crudo.

¿Cuál cree que es el perfil de emprendedor?

Como he dicho antes, cualquiera puede ser emprendedor, pero como cualidades personales, un emprendedor/a es alguien dispuesto a resolver problemas todos los días, que sabe mantener la cabeza alta en los buenos y malos momentos, que se rodea de buenos profesionales implicados, y que lucha por un sueño que es dedicarse a lo que realmente le gusta.

¿Cuáles son los pros de trabajar para uno mismo? ¿Y los inconvenientes?

Trabajar sólo, «en la cueva» como solemos decir en el mundo de los telecos o informáticos, tiene las ventajas de que tú mismo te gestionas tu tiempo, tus horarios, y que en principio, no tienes jefe.

Sin embargo, si eres un ser social puedes sentirte sólo, y dedicando horas de gestión que quizás no sean tus puntos fuertes. En general, siempre es recomendable «salir de la cueva», socializar y buscar sinergias. Lo mejor que he hecho en los últimos proyectos es delegar y confiar en buenos profesionales, ya que uno de los principales problemas del emprendedor es querer hacerlo todo, ya sea para que no «copien» la idea o los procedimientos, o porque te crees que sólo lo sabes hacer tú.

¿Qué consejo daría a alguien que está pensando en montar su propia empresa?

Sobre todo, lo importante es que crea en la idea y si puede ser, que le apasione el trabajo a desempeñar en dicha empresa. En Ecommaster, que es un máster de marketing digital y comercio electrónico que dirijo, instamos (casi obligamos) a los alumnos a que emprendan una idea y la conviertan en negocio digital.

A muchos alumnos les cuesta encontrarla, pero los que lo consiguen se sienten muy orgullosos de ello y no lo cambian por trabajar para terceros. Para ejercer libremente la profesión, lo que aconsejo es que nos hagamos un DAFO de nosotros mismo, un pequeño análisis de la competencia y un pequeño bussiness plan para estar seguros del paso que vamos a dar, y establecer varios planes B por si la iniciativa no funciona y poder pivotar a tiempo.

¿Su proyecto tiene algún objetivo más?

El proyecto tiene varios objetivos basados más en lo emotivo que en el bussiness. El principal objetivo es intentar que el proyecto sea autónomo y delegable, es decir, que optimice procesos para que sea rentable los meses de Navidad (noviembre y diciembre). Y por otra parte, lo que realmente mueve turronesydulces.com es ese pequeño compromiso y modelo de vida por hacer llegar un turrón artesanal y familiar, con fórmulas que hemos venido conservando la familia durante muchos años a todo el mundo.

¿Cuáles son las claves para triunfar como emprendedor?

La clave del éxito es difícil de definir, y no soy nadie para dar este tipo de consejos. Hay buenos emprendedores que fracasan, y malos emprendedores que triunfan simplemente porque estuvieron en el sitio adecuado en el momento adecuado. Lo que sí que es común a casi todos los emprendedores es la actitud proactiva y la constancia.

¿Qué le diferencia de sus competidores?

Las fortalezas a veces se vuelven en debilidades. Tengo la suerte de haber podido estudiar y tener un perfil técnico que poco a poco he ido adaptando al mundo del bussiness y el marketing. Siempre suelo comentar como error personal el haber dedicado mucho tiempo a arreglar bugs en mi plataforma ecommerce, basada en Magento, en lugar de haberme dedicado a medir KPIs y aplicar estrategias de marketing online.

¿Cuánto ha invertido para el proyecto? ¿Cuál es la previsión para este 2015?

Por suerte, todo lo he financiado con recursos propios, aunque he de reconocer que si el tiempo que he dedicado lo hubiera tenido que contratar externamente, el proyecto no hubiera sido viable. Al principio la instalación de la plataforma la hice yo, pero más tarde tuve que contratar a un programador especializado en Magento para que actualizara la plataforma y la maquetara en base a un PSD de otra diseñadora hecho a medida (no había plantillas en Magento).

A día de hoy, invierto en mejoras de la plataforma, extensiones (plugins) e integraciones que aumenten la productividad y la mejora en los procesos. Para 2015 tenemos previsto desarrollar estrategias B2B y actualizar a la última versión de Magento.

¿Cuál es el mayor obstáculo actual en su proyecto?

La estacionalidad siempre es un hándicap porque en mes y medio tienes que fabricar con tus fórmulas y revisar el stock para dar un buen servicio al cliente y turrones recién hechos y de autor, artesanales de verdad. Si haces una mala previsión en la fabricación te quedas con excedente que ya es imposible de sacar.

Y todo ello unido a todos los trámites diarios de una empresa hacen que sea trepidante el ritmo en noviembre y diciembre. Se concentra todo el trabajo de un año en muy poco tiempo, aunque precisamente en eso es en lo que nos hemos hecho especialistas. También resulta complicado gestionar los recursos humanos porque difícilmente puedes convencer a un buen profesional que sólo trabaje durante esos dos meses, con lo cual, siempre tienes que estar buscando alternativas para el resto del año.

¿Cómo ve su proyecto en el futuro?

En un mundo tan trepidante como Internet, tenemos que estar pendientes de las últimas tendencias, de los competidores, de los hábitos de consumo. La temporada del turrón dura sólo dos meses de venta, y cuando llega la siguiente, 10 meses después, todo ha cambiado en el mundo digital, con lo cual . Lo que sí que pretendemos es ser una marca reconocida y exclusiva, más basada en la calidad que en volumen de facturación.

Fuente: El Economista (31/03/2015)