Los errores que debes evitar al crear tu pyme

Si estás pensando en poner en marcha un nuevo negocio debes tener muy claro desde el principio que el camino no va a ser fácil y, además, tendrás que estar preparado para lidiar con problemas e imprevistos.

Errar es humano, y equivocarse al crear una nueva empresa es más habitual de lo que piensas.

Por eso, vamos a contarte cuáles son los errores más frecuentes que se suelen cometer a la hora de crear una pyme.

Porque los ejemplos son muchos, y la clave es aprender de ellos para poder evitarlos.

Así, con motivación, paciencia, esfuerzo, aprendizaje y algo de ayuda, estarás más que preparado para abordar el reto de poner en marcha tu pyme.

Algunos de los errores más habituales que se cometen a la hora de crear una nueva empresa o negocio suelen ser:

No elaborar un plan de negocio o plan de empresa

El plan de negocio es realmente muy importante porque marcará la hoja de ruta de tu pyme. Te ayudará a establecer los pasos que debes seguir y los objetivos de tu empresa.

Un error común es pensar que el plan de negocio es un mero trámite en vez de considerarlo como una herramienta a tener muy en cuenta de cara al desarrollo futuro de tu negocio.

Algunos errores que se suelen cometer son: no definir correctamente los procesos de producción y los tiempos, olvidar establecer tu estrategia de ventas, o fallar en la estrategia al no analizar previamente a tus competidores y potenciales clientes.

No conseguir la financiación necesaria

La financiación para tu pyme es, sin duda, uno de los aspectos clave para que tu negocio pueda tener garantizada su supervivencia económica. Y es que, además de contar con tu inversión inicial, es muy posible que necesites más dinero.

Por eso, nunca olvides tener muy bien organizado todo tu capital desde el inicio de tu actividad, para poder anticiparte a imprevistos y disponer siempre de la financiación que necesites en cada momento.

No estar pendiente de la economía de tu pyme

A parte de disponer de fondos, es de suma importancia saber gestionarlos y tenerlos controlados en todo momento.

Debes prestar especial atención a cómo administrar la economía de tu negocio, ya que tendrás gastos de diferentes tipos: pago de salarios, compra de mercancías, impuestos, cuota, gestoría, seguros, comisiones bancarias, arrendamientos, suministros…

No olvides llevar un registro de todo el dinero que tu empresa ingresa y gasta, para tener bien controladas tus finanzas.

Equivocarte con la forma societaria de tu pyme

Siempre puedes elegir entre empezar emprendiendo como autónomo o hacerlo directamente creando una sociedad. Entre ambas opciones, existen una variada cantidad de formas legales para poner en marcha un proyecto de negocio.

Lo más importante es tener claro que no todas ellas van a suponer las mismas implicaciones contables ni legales.

Por ejemplo, con una Sociedad Limitada el patrimonio del emprendedor va a estar más protegido, aunque este tipo de sociedad va a suponer unos costes mayores.

Piénsalo bien, y valora los pros y contras antes de elegir la forma societaria de tu pyme si finalmente seleccionas esta opción para poner en marcha tu negocio.

No dar de alta a tu pyme en el IAE

Es una de las gestiones que no debes pasar por alto. Tanto para ejercer como autónomo como para realizar cualquier actividad económica, tienes que darte de alta e indicar cuál será tu actividad en el Impuesto de Actividades Económicas (IAE).

El error suele ser que muchas personas piensan que no tienen que darse de alta en el IAE si están exentas de su pago. Pero, como decimos, es obligatorio darte de alta, independientemente de que estes exento de pagarlo.

Y es que tanto las personas físicas como las sociedades jurídicas con una facturación no superior al millón de euros están exentas de pagar el IAE. Pero eso sí, nunca olvides que darse de alta es obligatorio.

No acertar al establecer los precios

Aunque parezca mentira, este es uno de los principales errores que afectan al devenir económico de las pymes y startups.

No definir bien los precios de sus productos o servicios, al ser o muy caros o demasiado baratos, supone muchas veces un obstáculo para cubrir costes y generar beneficios.

Para evitarlo, es importante hacer un buen análisis previo de la situación actual del mercado dentro de tu sector de actividad y prestar atención a los precios que tiene tu competencia.

Olvidarte de cuestiones legales importantes para tu negocio

La puesta en marcha de una empresa trae consigo numerosos trámites y mucho papeleo.

Por ello, es importante estar atento para tener toda la documentación legal al día y evitar la posibilidad de que se pueda incurrir en infracciones que te traigan un disgusto en forma de sanción.

Revisa bien y comprueba tener en regla todos tus documentos legales, como la correcta redacción de tu pacto de socios, la patente de marca o la protección de datos.

Es muy fácil que se te pasen algunas de estas obligaciones, así que no olvides darle una vuelta con mucho detalle.

Descuidar la solicitud de ayudas y subvenciones

Algo que suele pasar mucho, y es uno de los peores errores que se pueden cometer: olvidarte de las ayudas y subvenciones que hay a disposición de tu nueva empresa.

Existen muchas e interesantes ayudas para establecer una nueva empresa, pero es fundamental que las solicites por la vía correcta y dentro de los plazos establecidos.

Por ello, infórmate bien de todas las opciones que tienes a tu disposición. Algunas de ellas son:

  • Pago único o capitalización del desempleo.
  • Ayudas y subvenciones para autónomos, tanto autonómicas como estatales.
  • Líneas ENISA de financiación.
  • Financiación del Instituto de Crédito Oficial (líneas ICO).
  • Ayudas a la creación de empresas de las Cámaras de Comercio.
  • Ayudas para startups.

Prometer al público cosas imposibles de realizar

Para terminar, algo que parece de sentido común pero que en muchas ocasiones se convierte en un error que puede perjudicar mucho la puesta en marcha de una empresa: nunca prometas a tus clientes cosas que sabes que no podrás cumplir.

Es importante que seas realista y sincero con tus clientes en todo momento, porque así generarás confianza y darás la seguridad de que cumples con lo que prometes. De lo contrario, puedes perjudicar notablemente tu imagen y reputación.

Y no olvides que la mejor manera de evitar caer en estos errores es contar con ayuda experta y profesional para que tu pyme alcance todos sus objetivos.

Fuente: Infoautónomos