«La seriedad de las empresas españolas y su buena organización atrae a Alemania» Georg Abegg, socio director de Rödl & Partner en nuestro país, una firma que lleva más de 15 años ayudando a alemanes a invertir en las compañías españolas

Alemania quiere ayudar a España a salir de la crisis mediante la inversión en el corazón de su economía: las pymes. El acuerdo de inyección monetaria se firmó a finales de abril entre Luis de Guindos y su homólogo germano, Wolfgang Schauble. Esta semana, el semanario alemán «Der Spiegel» aseguraba que el monto de colaboración ascenderá a entre 800 y 1.000 millones de euros. Hablamos con Georg Abegg, socio director de Rödl & Partner en España, una firma que lleva más de 15 años ayudando a empresas alemanas a entrar en el capital de compañías españolas y viceversa. 

¿Cómo va a producirse el préstamo a las pymes españolas? 

Es difícil describir cómo se producirá el préstamo ya que el gobierno alemán no ha concretado aún los detalles de la propuesta. El ejecutivo de Merkel ha anunciado que quiere ayudar a las pymes españolas a acceder a la financiación mediante un crédito global a través del Banco alemán de Crédito para la Reconstrucción y el Desarrollo (KfW). Este programa se articularía a través del KfW y de sus homólogos de los países en crisis. En el caso español sería el ICO, que no daría el crédito directamente a las empresas sino que utilizaría la red bancaria para otorgar préstamos. 

¿Qué efectos puede tener a corto y largo plazo en la economía española? 

Estoy seguro de que esta medida puede tener efectos positivos a corto plazo, siempre y cuando se cumplan dos requisitos. En primer término, sería necesario que las líneas ICO se abrieran para préstamos ordinarios y no sólo para inversiones, de modo que las empresas pudieran obtener liquidez con mayor facilidad. En segundo lugar, la red bancaria debería actuar con agilidad y rapidez haciendo uso de la información que tienen a su disposición sobre las empresas y de la estrecha relación que sus sucursales mantienen con las pymes. 

«Sería necesario que las líneas ICO se abrieran a préstamos ordinarios»

¿Dónde invierten hoy las empresas alemanas en España? ¿Ha bajado el volumen de inversión por la crisis del euro?

Las empresas alemanas invierten en España en la práctica totalidad de los sectores, especialmente en aquellos ámbitos en los que ya existía una relación comercial con anterioridad al comienzo de la crisis en la zona euro. En cualquier caso, nuestros datos nos indican que el volumen de la inversión alemana en España no se ha reducido a pesar de la situación económica española. Por el contrario, España es cada vez más atractiva para las empresas alemanas. 

Sin embargo, ello no obsta para que se observen ciertas diferencias en el comportamiento de los inversores alemanes, con la crisis como evidente punto de inflexión. De este modo, hemos percibido como con anterioridad el inversor alemán actuaba con mayor tranquilidad, incluyendo en su cartera activos con el objeto último de obtener un beneficio en un horizonte a largo plazo. En la actualidad, habida cuenta de la atmósfera de inseguridad imperante, detectamos un cambio en la dinámica de inversión, que se concreta sobre todo en la tendencia creciente a adquirir empresas españolas por un bajo precio. En la mayoría de los casos, se trata de empresas españolas en dificultades, algunas incluso al borde de la quiebra, que encuentran en las empresas alemanas un socio fuerte al que pueden recurrir a corto plazo. Todo ello conforma un contexto volátil, en el que las decisiones se toman cada vez con mayor rapidez. 

¿Qué es lo que más interesa a las compañías alemanas de las españolas? 

Ha de tenerse en cuenta que cada caso concreto es un mundo. Sin embargo, destacaría sobre otros aspectos el hecho de que las empresas españolas en términos generales son serias, ofrecen un buen producto y suelen estar dotadas de una buena organización. Según nuestra experiencia de los últimos años, los sectores que más han interesado a las empresas alemanas han sido la automoción, las energías renovables y la tecnología, si bien también el sector de los servicios ha sido objeto de inversión. 

¿Qué diferencias fundamentales encuentra en una empresa mediana tipo española y otra alemana? 

La principal de las diferencias radica en la financiación. No cabe duda de que las empresas alemanas gozan de una mayor facilidad para financiarse. Es cierto que en el pasado, en torno al año 2000, las empresas alemanas tuvieron que afrontar una crisis de financiación similar a la española como consecuencia de la imposibilidad de obtener crédito. Los empresarios alemanes aprendieron de aquella situación las dificultades que entraña mantener una buena relación de colaboración con la banca en tiempos de crisis. En consonancia con esto, en Alemania decimos que la banca te da un paraguas cuando hace buen tiempo y no duda en quitártelo cuando empieza a llover. De esta situación se deriva la conclusión de que es necesario aumentar los recursos propios con el objeto de acabar, en la medida de lo posible, con la dependencia del crédito bancario. 

«Existe una tendencia a adquirir empresas españolas a un bajo precio»

¿Acabarán superando las exportaciones españolas a las germanas por la rebaja de costes laborales?

La rebaja de los costes laborales en España redundará con toda probabilidad en una mejora de la competitividad que tendrá como consecuencia lógica un aumento de su potencial de exportación. Estimo que el consecuente incremento de productividad que experimentarán las empresas españolas es clave a la hora de abordar la conquista de nuevos mercados, tan necesaria a la vista de la actual coyuntura. 

En lo que respecta a sectores españoles tradicionalmente exportadores que conocemos de cerca, destacan particularmente los ámbitos de la alimentación y la tecnología. Es habitual que estos exportadores españoles soliciten que les acompañemos y asesoremos en el contexto de sus inversiones en Alemania, ante la posibilidad que ofrecemos de prestarles servicios en castellano. De esta manera, ponemos nuestro grano de arena para que la industria alemana pueda tomar conciencia de la competitiva oferta de productos procedente de España. 

¿Está tomando el Gobierno español las medidas adecuadas para salir de esta crisis? 

En este punto, creo que es necesario llevar a cabo un análisis en una doble vertiente. Desde una perspectiva estrictamente empresarial, creo que se están sentando las bases que posibilitarán un crecimiento adecuado y sostenible. La reforma laboral, a la que antes he hecho referencia, ha sido un cambio drástico, especialmente para los trabajadores. Me ha sorprendido positivamente que una modificación de este calado se haya podido llevar a cabo de una forma tan pacífica. 

Sin embargo, otras modificaciones que considero importantes aún no han sido abordadas por el Ejecutivo español. Entre ellas, cabe mencionar especialmente la reforma de las administraciones públicas. Con carácter general, suele ser difícil para los gobiernos tomar medidas en lo que respecta al propio funcionamiento del sector público o de los partidos políticos. 

¿Cree que el dictamen de la austeridad propuesto por Merkel está ahogando a la economía española? 

Es cierto que las políticas de austeridad excesiva pueden constituir un problema. En cualquier caso, con independencia de que se opte por una política económica más o menos austera, no podemos pretender que el Estado en sí mismo se convierta en el motor de la economía. El Estado puede incentivar con mayor o menor acierto el crecimiento, pero son los empresarios, más allá de la inversión pública, los que deben impulsar la economía española. 

¿Puede España retomar la senda del crecimiento a través del impulso de sus pymes? 

Las pequeñas y medianas empresas constituyen, tanto en España como en Alemania, la base del tejido productivo. Por lo tanto, el retorno a la senda del crecimiento dependerá directamente de este tipo de empresas. Opino que las pymes son especialmente relevantes a la hora de configurar una clase media sólida, aspecto que se antoja fundamental para el desarrollo positivo de cualquier país.