La Costa encara el mejor invierno turístico de su historia gracias al repunte de nórdicos Cerrarán dos mil camas hoteleras pero seguirán abiertas 510 más que la temporada pasada, sube la ocupación y hasta se acortará y retrasará la llegada del Imserso.

No está ni mucho menos derrotada, pero la gran enemiga del sector turístico de la Costa Tropical se presenta más débil que nunca este invierno. Los hoteles del destino de sol y playa de Granada están logrando plantar cara a la ‘estacionalidad’ con un incansable trabajo de promoción y búsqueda de clientes en los países nórdicos que está dando sus frutos y que permitirá a los ‘valientes’ que abren sus puertas los 365 días del año encarar la temida temporada de invierno con buenas perspectivas. Este año los hoteles de la Costa Tropical disfrutarán de la mejor temporada baja turística de su historia en lo que a ocupación media se refiere, según coinciden las opiniones de los hoteleros recabadas por IDEAL y por parte de la Asociación de Hoteleros de la Costa Tropical.

Por ejemplo este pasado mes de noviembre -junto a enero y febrero los que más cuesta arriba se le hacen a la Costa- se ha cerrado con una buena ocupación del 65% en la mayoría de los grandes hoteles.

La clave que explica esta buena coyuntura es el repunte que desde hace unos años viene experimentando el turista nórdico, que siempre ha sido el cliente estrella de los inviernos de la Costa Tropical pero que este año ha incrementado sus reservas y ha abierto el abanico con la llegada de operadores nuevos que traerán más suecos, noruegos pero también finlandeses y daneses a los hoteles de Almuñécar. El aumento del cliente internacional permitirá así a la Costa Tropical reducir su tradicional dependencia del programa de vacaciones sociales del Gobierno, la otra gran tabla salvavidas del sector turístico en los meses más duros que, sin embargo, ofrece una rentabilidad muy ajustada para los hoteles. Así será por ejemplo en el hotel Victoria Playa, uno de los cuatro estrellas emblemáticos de Almuñécar, que este año ha reducido su cupo de clientes de Imserso así como los meses de estancias en el hotel, que se reducirán a enero, febrero y abril, mientras que en otros años los jubilados nacionales han sido clientes de peso durante los seis meses de temporada baja.

«El postverano y la primavera se están alargando con mejores niveles de ocupación. El turista internacional es mucho más rentable en invierno y hemos trabajado mucho para conseguir operadores nuevos», comenta el director del Victoria, José Andrés Fernández. Pensando especialmente en sus clientes nórdicos, que adoran las caminatas por las vegas y paseos de Almuñécar o jugar a la petanca en la playa los días soleados de invierno, los hoteles adaptan sus instalaciones y horarios. «Son clientes con estancias mínimas de dos o tres semanas y, mientras los españoles no se meten en la piscina climatizada a partir de noviembre, a ellos les encanta», apunta.

En la misma línea, el presidente de la Asociación de hoteleros de la Costa Tropical, Rafael Lamelas, pone en valor el buen trabajo de comercialización que han realizado los hoteles. «Se ha asistido a muchas ferias e incidido en este sector, el aumento de clientes nórdicos en invierno es fruto directo del buen trabajo que se ha realizado en los últimos seis o siete años», valora.

Sin lanzar las campanas al vuelo, Lamelas se congratula de las buenas perspectivas hoteleras para el destino y cree que hay que seguir incidiendo en la promoción por parte de las administraciones.

«El reto sería dar un paso más y evitar el cierre de hoteles», señala. Y es que desde este invierno la Costa volverá a perder alrededor de 2.200 camas hoteleras de una planta total de 7.800. Son las de los establecimientos de temporada, el Playa Granada Club Resort de Motril y Playa Cálida de Almuñécar, que cierran de noviembre a marzo, junto al Almuñécar Playa, que reabrirá antes, en enero, y otros pequeños establecimientos como Los Fenicios, que cierran por política de empresa. La parte positiva es que, al menos, no hay sorpresas y ya no se suma ninguno de los otros grandes hoteles que durante los años de crisis sí llegaron a cerrar en invierno. El último dato disponible del INE es del mes de octubre y señala que la Costa Tropical mantenía 7.216 plazas hoteleras abiertas, por encima de las 6.706 que había por esas fechas el año pasado; 510 más.

Otro de los cuatro estrellas que afrontan este año la temporada con mejores perspectivas que el anterior es el Bahía Tropical de Almuñécar, que también se aferra al turista internacional. «Este puente de diciembre se presenta al 75%, estamos muy contentos y tendremos picos de hasta el 85% gracias al turista nacional, pero en la temporada baja ha ganado peso el internacional, hemos aumentado en suecos y nórdicos», resume la jefa de Recepción, Rocío Andújar.

Buena Navidad

Y no menos optimistas son las cifras del hotel Albayzin del Mar, que ha aumentado un 15% con respecto al año anterior sus reservas para este puente de diciembre y un 30% las de las próximas fechas navideñas. «Del 6 al 8 de diciembre estamos al 80% y del 8 al 10 al 100%. El calendario ha venido muy bien y ha influido que los colegios han hecho fiesta. La gente está deseando hacer escapadas, tenemos clientes principalmente andaluces, de Sevilla y Málaga. En cuanto a Nochebuena tenemos ya reservado el 50% de las camas y para Nochevieja el 100%», explica el director de este cuatro estrellas, Jesús Megías.

A pesar de las buenas marcas de su establecimiento, Megías insiste en que la Costa Tropical necesita una mayor oferta de ocio complementaria para hacer frente a los inviernos. «Tenemos un déficit importante en centros comerciales en la Costa Tropical. Al turista internacional le gusta el ‘shopping’ y si en enero y febrero los precios de la capital están igual que los de los de la Costa es imposible competir en este segmento», analiza. Además, pone el dedo en la llaga al incidir que el reto no pasa por mejorar la ocupación sino la rentabilidad hotelera. «Hay un repunte del turista nórdico, pero en función del precio. Vienen porque les es más barato pernoctar aquí siete días que pagar la calefacción en sus países», advierte.

Fuente: Ideal