La Costa duplica en cinco años su producción ecológica El tomate, en sus variedades redondo, cherry y cherry pera, es el producto más representativo de las explotaciones de la costa granadina

La búsqueda de valor añadido para sus productos y una mayor concienciación medioambiental son las principales causas que han llevado a los agricultores de la Costa de Granada a cultivar cada vez más con procedimientos sostenibles y ecológicos. Así, en los últimos cinco años la superficie destinada a este fin se ha duplicado, y en 2005 eran menos de 250 las hectáreas que se dedicaban a este modelo de producción, mientras que hoy en día son unas 600, según explicó el responsable provincial de COAG, Miguel Monferrer.

En concreto, según un estudio de la organización agrícola y ganadera, el crecimiento que se produjo en este periodo es de un 110 por ciento, aunque existen claras diferencias entre los incrementos de unos productos y otros. A pesar de que éste podría parecer un aumento considerable, nada más lejos de la realidad, ya que estas 600 hectáreas que se dedican en la actualidad a la agricultura ecológica en la comarca suponen entorno al 10 por ciento de todo el suelo destinado a esta parte del sector primario, un porcentaje similar al que se obtiene en el conjunto de la provincia (11 por ciento).

La comarca cuenta con producciones de agricultura ecológica en las explotaciones dedicadas a las hortalizas, las de frutales o las de subtropicales, así como en muchas de las extensiones de terreno existentes en la Contraviesa (Norte de la comarca) o en la zona de la Almijara (Oeste) dedicadas a la siembra de vides que posteriormente se emplean en la elaboración de reconocidos vinos.

En cuanto a los productos, los de mayor representatividad son el tomate (en sus variedades redondo, cherry y cherry pera), el pepino holandés, la judía verde, las berenjenas y la lechuga verde. Los subtropicales representan sólo el 15 por ciento de la producción total, mientras que los índices más altos se dan en las hortalizas.

Tanto COAG como los técnicos municipales y los de fincas experimentales han puesto de manifiesto que un requisito indispensable para que la agricultura ecológica continúe con su crecimiento es la puesta en marcha de un mayor número de puntos de venta ecológicos, así como una mejor presentación en los lugares en los que ya se distribuyen y una mayor promoción de estos productos.

La principal ventaja de estos alimentos para la salud de las personas es que no se emplean pesticidas ni abonos químicos en su producción. En la mayoría de los casos se emplea la lucha biológica (insectos se comen a las plagas) para su supervivencia.

Fuente: La Opinión de Granada (05/09/2010)