Jóvenes emprendedores españoles: ¿Una verdadera salida profesional? Desde hace unos años está de moda pensar que el emprendimiento es la cura milagrosa del desempleo nacional. Por otro lado, sabemos que aunque nuestros jóvenes sigan soportando un 42,9% de paro, ya no se ven como futuros empresarios, tal y como ocurría en el pasado 2015.

Así lo afirma el III Informe Young Business Talents, elaborado por Praxis MMT, ESIC, Nivea, y la Universidad de Granada, con la finalidad de analizar las tendencias y actitudes de los preuniversitarios de nuestro país. De momento, los jóvenes prefieren trabajar en una organización privada importante, pero no descartan realizar una oposición para trabajar en la Administración pública, o incluso emprender.

Hasta ahora para ser emprendedor se necesitaba mucho tiempo, contactos, capital inicial, y sobre todo, experiencia laboral. El perfil del emprendedor en España es un hombre de unos 40 años que ya ha trabajado para varias empresas. Sin embargo, gracias a la tecnología y la influencia del modelo estadounidense, cada vez hay más startups que luchan para convertirse en el próximo Facebook, Apple, o Airbnb.

Quizás lo más importante para ser emprendedor sea no tener miedo al fracaso, conservar una pasión desmedida por el proyecto, y casi ser un poco adicto al riesgo. “Un emprendedor ve oportunidades allá donde otros solo ven problemas”, así de tajante lo afirmaba Michael Gerber en su libro ‘El mito del emprendedor’. Normalmente, los emprendedores valoran muy positivamente la anhelada flexibilidad y la libertad de no tener jefes. Igualmente, prefieren no sentirse coartados con convencionalismos a la hora de desarrollar sus ideas innovadoras, y por eso, no temen a los desafíos.

La difícil búsqueda de recursos económicos 

Actualmente, nos encontramos en mundo hipercomunicado debido a Internet y a las redes sociales, y en el que absolutamente todo comunica. Del mismo modo, las empresas más jóvenes son las más conscientes de la importancia de conectar con los usuarios a través de una imagen corporativa impecable. Igualmente, como futuros emprendedores debemos prestar una atención especial a la creación de la identidad visual de nuestra compañía, ya sea de una forma impresa o digital.

Asimismo, la papelería corporativa impresa nos ayudará a diferenciarnos de la competencia gracias a diferentes elementos como son las tarjetas de visita, los folletos, los rollups, o las bolsas. En este sentido, encontramos empresas online como Saxoprint que nos permiten realizar los pedidos de forma online y sin necesidad de desplazarnos de nuestra oficina. Y es que aunque cada vez pese más lo digital sobre lo impreso, no deberíamos dejar la comunicación offline de lado, así como descuidar los pequeños detalles.

Sin embargo, para poder invertir en este tipo de productos y servicios hace falta financiación. Una barrera que puede frenar el desarrollo de una idea brillante, y que sin duda es uno de los principales problemas a los que se enfrentan los jóvenes emprendedores: la búsqueda de recursos económicos. La financiación por deuda mediante la Banca comercial no es fácil, la financiación por recursos propios es casi imposible, y ya nos quedan otras vías como son; las ayudas oficiales, subvenciones, amigos, familiares, y los nuevos proyectos de crowdfunding.

De hecho, para empezar será mejor no endeudarse demasiado y apostar por realizar un buen plan de empresa como carta de presentación ante los posibles inversores. Sin olvidarnos de analizar ni al mercado ni a nuestra competencia más directa. Al fin y al cabo, y por lo que parece, el emprendimiento más que una moda es una tabla de salvación.

Fuente: La Región