Haz negocio con el «boom» del deporte

La industria deportiva mueve cada día más dinero y pasiones, y crea oportunidades para los emprendedores. Las empresas relacionadas con este campo no sólo tienen en los deportistas profesionales su público objetivo, también son miles de personas las que practican de manera regular alguna disciplina. 

Xavi Escaich, exjugador del F.C. Barcelona y del R.C.D. Espanyol, es un ejemplo de emprendedor vinculado al sector deportivo. Después de retirarse del fútbol profesional quería que su vida siguiera unida al deporte. Y lo llevó a cabo con Myball.es, una tienda online que vende todo tipo de balones y pelotas. Este es sólo un ejemplo de las múltiples posibilidades que ofrece el mundo del deporte a los emprendedores. Por ejemplo, la venta de material, ropa o alimentos energéticos, la información o la aplicaciones. 

Las empresas nacidas al calor del deporte no sólo tienen en los deportistas profesionales su público objetivo, también son miles de personas las que practican de manera regular alguna disciplina. Pilar Andrade, presidenta de la Confederación de Jóvenes Empresarios (Ceaje) distingue en este campo dos tipos de emprendedores: “Los profesionales que han participado en la alta competición y otras personas, de todo tipo, que crean un producto específico para satisfacer una necesidad no cubierta en el mercado”. 

En cualquier caso, Andrade aconseja “estar al día sobre las últimas tendencias (el deporte tiene mucho de moda) y, sobre todo, ofrecer un producto especializado” 

GolfTab ofrece un sistema integrado para móviles que permite a los aficionados revisar su juego anotando y analizando sus resultados 

Escaich llevaba mucho tiempo madurando su idea y, tras seis meses de trabajo previo, dejó su empleo en una consultora de márketing, en septiembre de 2011 puso en marcha el negocio con otros dos socios. Sabía que había mucha competencia en el mercado. La mayoría de las firmas relacionadas con esta actividad están especializadas sólo en un deporte, “pero vimos un hueco que no estaba cubierto, que era ofrecer sólo balones, desde los más grandes a los más pequeños”, explica el exfutbolista. 

Con una inversión inicial de 120.000 euros (de aportaciones propias y un crédito del ICO) comenzaron a funcionar desde Barcelona. “Nuestros principales clientes son los clubes deportivos”, comenta el empresario. Pero continuó indagando sobre las necesidades de sus clientes y vio una nueva oportunidad en la personalización de los balones: “Es un valor añadido que nos ha sorprendido gratamente por su aceptación, tanto por parte de los clubes que nos piden que pongamos su escudo y colores, como por parte de empresas y ayuntamientos que solicitan su personalización para campañas concretas o acciones como la última cabalgata de Reyes”. 

El caso de Iván Gómez es la otra cara de la moneda, un aficionado al golf que echaba en falta una aplicación que le ayudara a mejorar su juego. Con esta idea comenzó a desarrollar el año pasado GolfTab, una start up que ha puesto en marcha en solitario y con sus propios recursos, y que ofrece un sistema integrado para móviles que permite a los aficionados revisar su juego anotando y analizando sus resultados: “La aceptación está siendo muy buena, incluso entre los campos de golf, que ofrecen así un servicio añadido a sus clientes”.

Fuente: Expansión (06/03/2013)