Este fracaso de hoy puede ser el éxito de mañana
Como la inspiración, que los errores te pillen creando una empresa. Aprende de tus equivocaciones y triunfarás en tus proyectos.
Muchos de los grandes descubrimientos e innovaciones tienen que ver con errores de grandes científicos o inventores que caminaron en la dirección equivocada y, por eso, llegaron donde querían. Genios matemáticos como Arquímedes, o científicos como Jonas Salk –descubridor de la primera vacuna contra la poliomielitis– son un ejemplo de esto. Thomas Alba Edison es autor de un paradigma de la aceptación del fracaso como algo verdaderamente útil para lograr el éxito: Edison solía decir que no se había equivocado mil veces para crear una bombilla, sino que había descubierto mil maneras de cómo no se hace una bombilla.
En la base de la creatividad y la innovación, consustanciales al emprendedor, está el no penalizar el fracaso. La escuela de negocios de Wharton, en Pennsylvania, ha desarrollado una iniciativa curiosa pero reveladora para perder el miedo al fracaso. Se trata de una especie de concurso de errores empresariales de los que se puedan sacar conclusiones valiosas para llegar al éxito. El nombre del concurso lo dice todo : Fallos brillantes: encontrando el éxito al otro lado del fracaso.
STEVE JOBS (APPLE)Jobs cedió tanto el control de su compañía que terminó por ser despedido, aunque regresó un tiempo después. No era el CEO con más experiencia, pero entendía como nadie su empresa. Cuidado con el control que cedes y a quién se lo das.La innovación requiere experimentación, y esto nos puede conducir inevitablemente a fallar. El error será un paso adelante si estás seguro de que cada intento sigue un plan bien concebido. Penalizar el fracaso hace que tu equipo se desanime a seguir intentándolo. Debes crear una cultura que recompense la innovación y la experimentación, en la que el fracaso sea visto como una experiencia de aprendizaje.
MARK ZUCKERBERG (FACEBOOK)Su gran visión le hizo imaginar Facebook en 2004, y su genio analítico le permitió hacerlo realidad. Pero Zuckerberg nunca ha sido un lider carismático, y su error fue justamente escoger e identificar su imagen pública con la de la compañía que fundó.Es cierto que en España se castiga mucho el error, se estigmatiza al profesional que ha tenido que echar el cierre a su negocio. A veces ese miedo al rechazo puede ser un freno a nuevas iniciativas. Para muchos emprendedores esto es más una cuestión psicológica. Se cree que la crítica va a ser muy dura y que se les va a tachar de ineptos, cuando la verdad es que el entorno más cercano no es tan duro. Lo importante es asumir el error como una parte del juego empresarial. Cuando te embarcas en un proyecto en el que inviertes capital, existe el riesgo de perderlo, pero la asignatura pendiente es entender que el fracaso no es más que un alto en el camino.
BILL GATES (MICROSOFT)El fundador de Microsoft es un visionario, pero en 2005 falló en la predicción de una oportunidad millonaria: los buscadores. Tu industria cambia, y el éxito te puede llevar a instalarte. Lo que funcionaba ayer puede no funcionar mañana. Debes estar preparado.Puesto que se trata de aprender de los errores, aquí van algunos –muy típicos, fruto de la experiencia de otros– que debes evitar a toda costa:
* No vayas solo. Es complicado crear un negocio escalable si eres la única persona involucrada.
* No hagas predicciones de ventas demasiado optimistas o alejadas de la realidad. Ajusta tus proyecciones basándote en los consejos expertos y en las normas del sector en el que trabajas.
LARRY PAGE (GOOGLE)De la misma forma que Bill Gates falló en la posibilidad de capitalizar la oportunidad de dominar los buscadores, Page perdió una oportunidad similar de dominar la revolución de las redes sociales. Vio su potencial, pero sencillamente no actuó para aprovecharlo.* Está bien que pidas consejo, pero no te pases. Si recurres a la opinión de demasiada gente, eso puede retrasar mucho tu decisión, y tu compañía podría quedarse para siempre en el punto de partida.
* No escojas un mercado demasiado pequeño que te impida crecer.
* Ni se te ocurra empezar si no tienes un plan de negocio bien estructurado. Pero el exceso en el plan de negocio tampoco es bueno.
* No contrates sólo a gente a la que siempre le gustan tus ideas y todo lo que dices.
* Tampoco pierdas demasiado tiempo preocupándote de lo que piensan los demás. Esto tiene que ver con no asustarse ante la posibilidad de equivocarse.
* No trates de hacer demasiado en muy poco tiempo. Debes estar seguro de que tienes las aptitudes para gestionar bien un negocio antes de entrar en otro nuevo.
Fuente: Expansión (03/07/2012)