El Gobierno regula la ‘segunda oportunidad’ para empresarios que quiebren su compañía

Que un emprendedor que cierre su empresa no tenga que soportar eternamente las deudas contraídas. Esa es la intención del Gobierno, que acaba de aprobar en el Consejo de Ministros la nueva Ley de Emprendedores, que incluye la regulación de la llamada ‘segunda oportunidad empresarial’. 

Lo ha avanzado este viernes la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, en la rueda de prensa posterior al propio Consejo. No ha entrado, no obstante, en detalles, con lo que la información completa y la estructura de esta regulación no se conocerán hasta la publicación de la nueva ley en el Boletín Oficial del Estado. 

La medida responde a una de las intenciones tradicionales del Gobierno. No en vano, Sáenz de Santamaría ya avanzaba en junio de 2012 que se estaba trabajando en esta ‘segunda oportunidad’ para que un emprendedor, tras cerrar su empresa por quiebra, pueda volver a emprender sin tener que asumir inmediatamente las deudas contraídas de su actividad anterior. 

«El fracaso no puede ser una condena a muerte»

Una postura que también viene siendo apoyada desde Europa. «El fracaso de un emprendedor no puede ser una condena a muerte», aseguraba a principios de año el comisario de Industria y Emprendimiento de la UE, Antonio Trajani: «Los estudios muestran que las empresas que vuelven a empezar tienen más éxito y una mayor supervivencia que la media de las empresas que empiezan; crecen más deprisa y dan más empleo». 

Por ello, la nueva medida irá destinada a cambiar la legislación en torno a las directrices que rigen las situaciones de insolvencia de una empresa o emprendedor individual. 

Sin embargo, aún no se sabe si esta medida se estructurará mediante la desaparición total de las deudas o mediante la ‘relajación’ en el pago de las mismas. Habrá que esperar, por tanto, a la publicación en el BOE para conocer los detalles. 

Visado para emprendedores que se instalen en España

Otra novedad viene de mano de una de las previsiones que hacíamos en nuestra quiniela para esta ley: el llamado ‘visado de emprendedores’, ya presente en países como Chile, Reino Unido o Canadá. La intención de esta medida pasa por que los emprendedores extranjeros que quieran instalarse en España puedan tramitar de manera considerablemente más ágil su visado para trabajar en nuestro país. 

En el horizonte, dos objetivos: por un lado, atraer el talento a España. Por otro lado, que ese talento sea capaz de generar empleo estable e innovador en nuestro país. 

Ayudas a la internacionalización

Otra de las medidas anunciadas tras el Consejo de Ministros es el establecimiento de ayudas a la internacionalización de nuestras empresas. En una situación de considerable caída del consumo en España, la intención del Gobierno es que las compañías españolas a las que les vaya medianamente bien puedan abrir las fronteras y extender su negocio a otros países. 

Esta es una directriz ya apoyada por otros estamentos públicos vinculados el Gobierno. De hecho, el ICEX editó la semana pasada un ‘Manual de Internacionalización’ para aquellas compañías que quieran probar suerte en el extranjero. 

En otro orden de cosas, la vicepresidenta también ha mencionado medidas de apoyo fiscal a los emprendedores, entre las que se encuentra la instalación de deducciones fiscales por inversión de beneficios. 

En total, una batería de medidas que, ante la provisional falta de detalles, conoceremos en profundidad tras su publicación en el BOE.

Fuente: El Confidencial (30/04/2013)