El distanciamiento social está acelerando la acogida de nuevas tecnologías en sectores de servicios

El distanciamiento social está acelerando la adopción de nuevas tecnologías, especialmente en los sectores de servicios. Los que se apresuraron a adoptarlas se situaron en mejores condiciones para capear los periodos de confinamiento impuestos en marzo.

Un ejemplo fueron los negocios que sirven comida a domicilio, que saben cómo aprovechar los recursos que brinda la tecnología. Algunos comercios descubrieron la realización de pedidos desde una aplicación móvil, el seguimiento digital, la creación de perfiles de usuarios y los pedidos por voz.

El 48% de las pymes invertirá en digitalización, según un estudio de Sage

Desde la perspectiva a largo plazo, el COVID-19 ha ampliado la brecha digital al fortalecer la posición competitiva de muchos líderes del mercado con gran escala, relaciones dominantes y sólidas capacidades digitales.

No obstante, los negocios más pequeños han ganado notoriedad al incrementarse la demanda de sus servicios. Aunque la propagación del COVID-19 ha provocado que muchas compañías echen el freno al gasto en TI, también ha creado una necesidad imperiosa permanente en las compañías que les ha llevado a acelerar sus iniciativas de transformación digital.

Sin importar en qué medida se apueste por la digitalización de la empresa, lo fundamental es interiorizar que el cliente ha cambiado su forma de consumir. El email, la web, las redes sociales y el chat representan el 87% de los medios de contacto utilizados por los clientes.

«Esto es una gran oportunidad para la mayoría de las empresas que hoy no cuentan con una estrategia de CRM (Customer Relationship Management), porque integrarlos les permitirá contar con una visión de 360º de los clientes a través de los datos de sus interacciones con la empresa», apuntan desde INCIPY.

Ahora o nunca es el momento de apostar por la digitalización de las pequeñas empresas

Las respuestas típicas «no me gustan las redes sociales», son aceptadas en el ámbito personal, pero en el profesional, no dejan de ser una herramienta más para vender y no perder clientes. En momentos como el actual es la única salida para muchos negocios.

La revolución digital trae consigo muchas oportunidades que no son fáciles de aprovechar, sobre todo para las pequeñas y medianas empresas del ámbito agroganadero. Como respuesta se han puesto en marcha Centros de Innovación Digital (CID) o Digital Innovation Hubs (DIH), a modo de ventanillas únicas para que puedan acceder a la información, los servicios y las instalaciones necesarias para alcanzar con éxito sus procesos de transformación digital.

La Administración está invirtiendo en esta salida ya que la ‘nueva normalidad’ nos ha traído más teletrabajo, más tiempo en casa, y más consumo desde los móviles. Todas las estrategias empresariales deben girar en torno al cliente. Y saber cómo se comporta, desde dónde compra y qué necesita son preguntas básicas que un empresario (pequeño o grande) debe plantearse sí o sí.

Fuente: Pymes y Autónomos