DevoluIVA permite a empresas y autónomos deducirse automáticamente el IVA de los tickets de gastos El proyecto cuenta con más de 15.000 establecimientos asociados y cuenta con garantía y seguridad ante cualquier inspección fiscal

Las empresas y los autónomos de España pierden cada año unos 1.000 millones de euros de IVA fiscalmente deducible, según datos de la Agencia Tributaria correspondientes a 2010. Esto se debe a que para recuperar el IVA deducible de los gastos profesionales solo es posible si se cuenta con una factura, en lugar de un ticket o factura simplificada, como ahora se denomina.

El principal motivo es la falta de tiempo, que no permite a muchos empresarios llevar a cabo dicho trámite. De hecho, hay casos concretos como el peaje o los aparcamientos en los que no es posible hacer la petición de factura al momento, añadiendo una tarea administrativa a la ya sobrecargada agenda, lo que hace que no compense el importe a recuperar en muchas ocasiones.

En Voxel Group, compañía española líder mundial en facturación electrónica en el sector de la hostelería, ha lanzado DevoluIVA, un sistema pionero que permite a empresas y autónomos recuperar más impuestos deducibles, al permitirles obtener de manera automática facturas electrónicas en lugar de tickets de gastos.

Establecimientos asociados

DevoluIVA cuenta con 15.000 establecimientos asociados, en los que los empresarios pueden adquirir de manera automática las facturas, pudiendo así deducir con garantía gastos que antes no podía, como restaurantes, taxis, parkings o peajes.

El funcionamiento es sencillo: Los usuarios cuentan con una tarjeta magnética, que deben enseñar en los establecimientos antes de pagar. Dicha tarjeta se pasa por el TPV del establecimiento, para que envíe los datos del consumo. Los datos de los tickets se integran automáticamente en el portal DevoluIVA.

De esta manera se los autónomos se pueden ahorrar tiempo y dinero fácilmente; y con garantía ante cualquier inspección fiscal. Con la factura electrónica no hace falta guardar los comprobantes de gasto en papel.

Fuente: El Economista (02/05/2014)