Aceites Maeva lidera las exportaciones españolas de virgen extra a China La empresa granadina  de la familia Torres abrirá este año una delegación en Abu Dabi.

El aceite de oliva se vende en China como artículo de lujo. Su precio está muy por encima del de semillas y su gastronomía aún no ha integrado el zumo de aceituna. Sin embargo, esta grasa vegetal es muy apreciada por los consumidores de la República Popular como alimento saludable. Suelen tomarlo a cucharadas o en capsulitas con la dosis recomendada como una medicina. En este formato mini se envasa una parte del que comercializa Aceites Maeva en el gigante asiático. Esta empresa granadina ocupa el primer puesto entre los exportadores españoles de aceite de oliva virgen extra a China, con casi 11 millones de euros facturados en 2014, según datos de la Oficina Económica y Comercial de la Embajada española en Pekín.

Esta compañía familiar tiene sus instalaciones (almazara, envasadora y almacenes) en Escúzar, muy cerca del aeropuerto de Granada y del puerto de Motril, infraestructuras claves para su negocio eminentemente exportador. Las ventas en el exterior representan el 70% de su facturación, que superó los 109,5 millones de euros en 2014.

La tercera generación de la familia Torres ha tomado ya las riendas de la empresa, cuyo origen se remonta a 1930, cuando el abuelo de los actuales gestores abrió la primera almazara en Porcuna (Jaén). «Mi padre continuó el negocio con una envasadora en Granada, adonde trasladó la almazara», explica Luis Torres Morente, director general de la firma. Su hermana Amalia es la responsable de Recursos Humanos.

Aceites Maeva integra todo el proceso productivo, desde el cultivo de la aceituna (tiene 300 hectáreas de olivar) hasta la comercialización del aceite de oliva envasado y a granel. Embotella 46.063.000 litros al año.

«Nuestro fuerte es la marca blanca o del distribuidor», señala Luis Torres. Así, el 80% de su producción se dedica a este segmento y sus clientes son grandes cadenas, de la talla de Wal Mart o Aldi en el mercado exterior. Como marcas propias comercializa las etiquetas «Maeva», «Almazara Torres Morente» y MAS (Maeva Arola Selección). Esta última oferta gourmet se lanzó en diciembre pasado de la mano del conocido cocinero Sergi Arola, que aporta su apellido al producto.

En el escenario actual del mercado español, con una producción corta y la perspectiva de que repunten los precios y se frenen las ventas, la exportación sigue enfocando el negocio de Aceites Maeva. Hace años que la compañía granadina tuvo la visión de salir al exterior e invirtió en una planta envasadora propia en México (Monterrey), con capacidad para embotellar hasta 10.000 toneladas al año. Desde aquí atiende el mercado mexicano y Estados Unidos, uno de sus destinos estratégicos. En este último país, concretamente en Filadelfia, cuenta con una oficina comercial, que se suma a las de China y Francia.

Este mismo año, Aceites Maeva abrirá delegación en Emiratos Árabes (Abu Dabi), otra de las plazas preferentes dentro de su plan de negocio, apunta el director general. Para ganar cuota en todos estos mercados y satisfacer los gustos autóctonos, Maeva comercializa aceites de distintos perfiles, con una gama de intensos y suaves.

Los esfuerzos por adaptarse a las exigencias regulatorias también se han dirigido a los formatos. Sus monodosis con forma de tarjeta de crédito a prueba de manchas, que se abren con una sola mano (una patente italiana que Maeva tiene en exclusiva); sus sprays sin gas ni alcohol para dosificar la cantidad de calorías sin contaminar y sus tarrinas, son la respuesta novedosa a la prohibición de las aceiteras rellenables.