2023 terminó con un 8,6% más de empresas constituidas que el año anterior Un reciente estudio de Experian mostró cómo el número de disoluciones empresariales descendió un 7,7% interanual en 2023. Sin embargo, las asociaciones empresariales siguen alertando sobre los riesgos para 2024.

2023 cerró con un 8,6% más de empresas constituidas que durante el año anterior. Así lo mostraron los datos de un reciente informe elaborado por Experian, en el que se pone de manifiesto que “el tejido empresarial español ha aguantado los envites de la economía internacional y de la inflación”, según explicaron.

En concreto, a finales de diciembre del año pasado existían 108.846 empresas constituidas, por las alrededor de 100.000 que existían registradas el año pasado. Por sectores, el comercio al por menor, la reparación de vehículos -talleres- y la hostelería fueron los que más empresas crearon.

A pesar de ello, se trata de los sectores que más autónomos perdieron el año pasado, como mostraron los últimos datos publicados por la Seguridad Social. En el caso del Comercio, la pérdida de trabajadores por cuenta propia ascendió, en 2023, a 13.000, un dato que muestra la enorme rotación de negocios en el sector.

Con respecto a las disoluciones empresariales, los datos de Experian mostraron cómo los datos de 2023 también han sido más positivos que los registrados durante el año anterior. En concreto, se disolvieron 62.248 sociedades, un 7,7% menos que en 2022, cuando se superaron las 67.400.

Por sectores, el comercio al por menor y la reparación de vehículos también fueron los que más negocios cerraron, seguidos de la construcción. Sin embargo, la cifra en todos los casos es menor que durante 2022.

El incremento de los costes podría frenar la actividad de las empresas en 2024

En paralelo a los datos del informe de Experian, las organizaciones empresariales están alertando sobre la desaceleración de la economía en la primera mitad del año. Es el caso de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) o la Confederación de la Pequeña y Mediana Empresa (CEPYME), desde donde relacionan esta cuestión con los elevados costes que están asumiendo los trabajadores por cuenta propia y los pequeños negocios.

En este sentido, CEPYME solicitó un mayor esfuerzo para apoyar la actividad productiva, creando un entorno más favorable, “que incentive la inversión y promueva la creación de empleo, mejorando las políticas activas y reduciendo los obstáculos actuales que, por ejemplo, impiden a muchas empresas cubrir determinadas vacantes, especialmente las de menor dimensión, que cuentan con recursos más limitados”, expresaron.

Por su parte, Lorenzo Amor, presidente de ATA, reclamó “seguridad jurídica y apoyo al tejido empresarial -autónomos y empresas- para mantener el empleo. Esto pasa por no poner trabas ni zancadillas, no establecer nuevos impuestos ni inflar la presión fiscal para autónomos y empresas”.

Para el presidente de ATA, durante el año pasado “los costes laborales, los costes de cotización y fiscales aumentaron”. Sin embargo, los datos de Seguridad Social mostraron cómo “la mayoría de autónomos y negocios han sido capaces de mantener el empleo. La única forma de que siga así, incluso de crear nuevos trabajos, es tener un clima de apoyo a la empresa y los autónomos, y no de castigarlos y ponerles zancadillas”, concluyó Lorenzo Amor.
Fuente: Autónomos y Emprendedores