Yo conseguí dinero del banco ¡pregúntame cómo!

Aportar recursos propios, pedir créditos participados, presentar una plan de negocio con números reales y reinvertir en tu crecimiento te abren el grifo de la financiación

La crisis está provocando que el acceso al crédito sea una tarea casi imposible. ¿O quizá no? En este reportaje, cinco emprendedores nos ofrecen las claves de cómo obtener financiación. Ellos lo han conseguido y quieren compartirlo contigo.

Si preguntamos en la calle, veremos que la sensación general es que los bancos han cerrado el grifo de la financiación y que conseguir un crédito para montar un negocio es hoy muy complicado.

Para Fernando Cañamaque, director de Inversiones y Organización de Caja Rural de Segovia, “dos factores fundamentales están provocando la disminución del crédito: la delicada situación de muchas empresas, con elevado endeudamiento y perspectivas de evolución poco favorables, y el momento especial que atraviesa el sector financiero, inmerso en una profunda reconversión”, explica.

Crédito sí, con más avales

Si las entidades financieras no paran de repetir que no han dejado de prestar dinero y que están manteniendo, o incluso aumentando su inversión crediticia, entonces ¿qué sucede? ¿Hay crédito o no? Pues bien. Parece que sí, sólo que ahora cada proyecto se mira con lupa. Y se exige total compromiso del emprendedor, lo que generalmente incluye implicación económica. En casi todos los casos, la entidad pedirá el aval personal de los socios de la empresa, respaldando la operación con su patrimonio. “No debes pedir algo si no estás dispuesto a avalarlo ni a asumir ningún riesgo. Si tú no crees en tu proyecto, el banco tampoco”, afirma Miguel Portillo, responsable operativo de Pixelnews.

Saca la calculadora

Desde este punto de partida, conviene tener en cuenta estos aspectos a la hora de solicitar un crédito:

– El producto adecuado. Como indica Cañamaque, “lo primero a tener en cuenta es la adecuación del producto financiero a las necesidades. Por ejemplo, evita financiar inversiones (largo plazo) con líneas de circulante (corto plazo)”.

– Afinar las cantidades. El responsable de Caja Rural de Segovia recomienda “dimensionar adecuadamente el capital que se necesita para la inversión o las necesidades de circulante que deben cubrirse y evitar así desequilibrios financieros”. Algunos de los emprendedores consultados recomiendan no quedarse corto a la hora de pedir crédito. Siempre hay que saber cuál es la cantidad principal e indispensable, pero no está de más presupuestar algunos gastos complementarios. Si la entidad no concede el 100% del capital solicitado, el recorte afectará a estos gastos que no comprometen la viabilidad proyecto.

Fuente: Emprendedores.es (02/08/2012)