Su nuevo empleo: una empresa de ‘outsourcing’

Si va a buscar empleo será uno más en una fila interminable. Si ofrece una propuesta de valor palpable, puede abrir cualquier puerta. Esta es la actitud con la que tiene que afrontar su futuro profesional: analice cuáles son sus habilidades, diseñe un servicio que pueda ofrecer a otras empresas en forma de subcontrata y, no trate de hacerlo todo usted solo, lo que no pueda o no sepa hacer, deléguelo también.

Cuando un profesional se queda en paro la actitud más común es tratar de volver a reincorporarse al mercado laboral haciendo lo mismo. Enviar el currículo a cientos de empresas y esperar que le llamen para una entrevista. Sin embargo, existen otras opciones. Una de ellas es analizar qué habilidades posee y cómo las puede convertir en un producto o servicio que pueda vender a otras compañías. Su objetivo deber ser diseñar algo que sea la solución llave en mano para los problemas que puedan tener sus potenciales clientes. En resumen, conseguir que deleguen en usted.

Es el llamado outsourcing o externalización de servicios que habitualmente se asocia con grandes firmas, pero que es perfectamente viable a pequeña escala. El profesor Jordi Vinaixa, director académico de Esade, explica que este modelo de trabajo es una buena opción para los emprendedores, “pueden diseñar un producto que saben que tiene una demanda real en el mercado y que le reportará unos rápidos e importantes ingresos que podrá destinar a seguir creciendo o invertir en proyectos más específicos o ambiciosos que no ha podido desarrollar por falta de liquidez”.

Planifique su proyecto

El punto de partida es la actitud personal, siempre hay que tener presente que cada uno posee habilidades que el mercado necesita. Según Ariel Andrés, consultor y autor de Ahora te toca a ti, “hay que recordar que para que deleguen en nosotros hay que ofrecer soluciones a medida. Asimismo, podemos focalizarnos no solo en resolver problemas, sino también en aprovechar oportunidades”. En definitiva, ser proactivos, flexibles y canalizar nuestras habilidades en crear algo atractivo, más que diferente, y que pueda ser la solución para empresas que necesitan bajar sus costes o focalizarse en otros campos de actuación. Porque como recuerda Andrés, “las reglas del juego han cambiado y actualmente pocas compañías quieren contratar personal, pero todas necesitan reducir sus costes. Por tanto, no le pida empleo, ofrézcale una propuesta de valor concreta”.

Pida ayuda

Esta estrategia laboral implica una forma de trabajar distinta. Igual que usted trata de que deleguen en su empresa, debe concentrar su máximo esfuerzo en generar negocios y comprender que no podrá hacerlo todo solo.

Al comenzar a crear su propio trabajo, es esencial saber que habrá muchísimas actividades que pueda delegar. No solo aquellas que no le gustan, sino las que otros pueden hacer mejor y con una relación coste-beneficio más favorable. No contemplar esta posibilidad es un error demasiado habitual entre los nuevos empresarios que quieren controlar todos los ámbitos de su negocio y no se dan cuenta que puede truncar el crecimiento del mismo.

Actualmente, muchos emprendedores crean estructuras livianas, con costes fijos mínimos y en las que todo lo demás es variable. Debe tener en cuenta que al comenzar de esta manera tiene una ventaja muy clara: necesitará poca inversión. Su empresa irá creciendo según sus resultados y para ampliar siempre hay tiempo.

Fuente: Expansión (15/03/2012)