¡Ser pequeño y aparentar ser grande!
Hay veces que dejar ver el pequeño tamaño de tu empresa puede ser un obstáculo para crecer. Las nuevas tecnologías, el mercado de servicios auxiliares y un poco de imaginación te ayudarán a parecer más grande.
A veces, como afirma el dicho, tan importante como el ser es el parecer. Esta es una ley de gran importancia en el mundo de los negocios, en los que mostrar determinada imagen frente a tus clientes potenciales puede suponer muchos miles (o millones) de euros en ventas.
Las micropymes pueden perder muchos negocios por su pequeño tamaño, por lo que muchas ponen en marcha una serie de medidas para maquillar temporalmente esta situación.
Tener una oficina elegante para mantener reuniones con los clientes, una secretaria que te gestione las citas, una estructura amplia de personal, una web que dé buena imagen… Sin apenas coste, o bien por muy poco dinero, tú también puedes disponer de todos estos valores y que pueden suponer la diferencia entre ganar o perder interesantes contratos.
En muchas ocasiones, comportarse como los grandes, puede ser útil para conseguir un serie de beneficios como los siguientes:
Muestra fortaleza. La tónica general del pasado año fue la de reducir recursos. Según la Radiografía de la Pyme española 2011 elaborada por Sage, “más del 60% de las pymes considera que en 2011 su situación se mantendrá o empeorará”, por lo que la mayoría no invertirán en innovación (59%), nuevo personal (83,3%), ni inmuebles (73%).
Destaca y diferénciate. En sectores saturados como la asesoría y la consultoría, donde la oferta se basa en la capacitación personal, los elementos externos pueden ser el punto diferenciador. Una web impactante se recuerda mejor que un currículum magnífico, pero igual al de otros muchos.
Ten satisfechos a los clientes. Esforzarse por parecer más grande suele conllevar una mejora en la atención a clientes y proveedores, lo que, a su vez, favorecerá su opinión sobre la empresa.
Para atraer a los inversores… Si el tamaño es un síntoma de buena salud, aún lo es más transmitir esa imagen ante un inversor. Es cierto que estudiará bien las cuentas, pero demostrarle que la empresa tiene vocación ganadora siempre será un punto a favor.
Fuente: Emprendedores.es (24/01/2012)