Para qué puede ser útil una oficina virtual si eres autónomo Los autónomos se podrían ahorrar los costes físicos de un local y realizar las gestiones desde un mismo lugar.

Una oficina virtual es un espacio que está concebido para llevar a cabo una serie de actividades parecidas a las que se realizan en una oficina tradicional. Este tipo de oficinas pueden ser de gran utilidad para los trabajadores autónomos, ya que así se podrían ahorrar los costes físicos de un local y realizar las gestiones desde un mismo lugar.

Desde la Federación Nacional de Trabajadores Autónomos (ATA) indican que al disponer de una oficina virtual el empresario obtendrá una dirección comercial de prestigio, una identidad corporativa, así como la gestión de los correos, documentos, facturas y llamadas a un coste más asequible que si tuviera un local físico.

Además de eso, desde ATA recuerdan que las oficinas virtuales carecen de fronteras, por lo que pueden ser también muy útiles cuando el negocio quiera expandirse. “Es una buena forma de proyectar presencia antes de establecerse físicamente en otra región”, aseguran desde la organización de trabajadores autónomos.

Por otro lado, a través de una oficina virtual también es posible establecer el negocio en otro país e internacionalizarlo. Esto ocurre, fundamentalmente, en los casos en los que el empresario desea reducir sus gastos y no quiere arriesgar su capital con el establecimiento de su negocio en otras tierras.

Factura electrónica

A través del Kit Digital los empresarios tienen la oportunidad de digitalizar su negocio e implantar una oficina virtual para poder solucionar los problemas desde cualquier lugar.

Uno de los servicios que pueden incluirse en la oficina virtual gracias al programa Kit Digital es la facturación electrónica. Es una medida que está pensada para digitalizar las relaciones empresariales, reducir costes de transacción y facilitar la transparencia. Además, es una medida esencial para atajar la morosidad.

Cabe recordar que con la implantación de la ley Crea y Crece pasa a ser obligatoria la emisión de facturas electrónicas tanto para las empresas como para los trabajadores autónomos. La digitalización de las facturas permite la trazabilidad de las mismas y el garantizar el control de los pagos, además permite formalizar de una manera más cómoda las operaciones comerciales con los clientes e instituciones públicas.
Fuente: Cinco Días