La Unión Europea ofrece una ayuda de 1.000 euros para que los pequeños negocios protejan su marca Según un informe de la Unión Europea, las pymes que ven vulnerada su propiedad intelectual tienen menos probabilidades de sobrevivir. La Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea ha activado una línea de ayudas para que los pequeños negocios puedan registrar sus marcas y diseños.

Los ataques a la propiedad intelectual, sobre todo en Internet, son “especialmente” peligrosos para la economía en general, pero, en particular, para las pequeñas y medianas empresas. De hecho, según un nuevo informe publicado por la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), “las pymes cuya propiedad intelectual se vulnera tienen menos probabilidades de sobrevivir al cabo de cinco años”.

Con el objetivo de que las pymes españolas puedan invertir en su propiedad intelectual y patentar sus marcas, y así evitar daños que puedan afectar a su supervivencia, la Comisión Europea ha lanzado la campaña “Ideas Powered for business SME Fund”, que permitirá a las pequeñas y medianas empresas recibir un bono de hasta 1.000 euros para cubrir parcialmente la inversión que realicen en propiedad intelectual.

Las pymes ya pueden solicitar las ayudas para proteger su propiedad intelectual

Un año más, la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO) ha puesto en marcha el Fondo para Pymes “Ideas Powered for business SME Fund”, una iniciativa de la Comisión Europea creada con el objetivo de “prestar apoyo financiero a las pequeñas y medianas empresas de la Unión Europea para la protección de sus Derechos de Propiedad Intelectual e Industrial”.

Este fondo es un programa de reembolso que emite bonos que pueden utilizarse para cubrir parcialmente las tasas correspondientes a las actividades seleccionadas, habiendo varios tipos de bonos disponibles en función de la actividad que se quiera llevar a cabo.

Por el momento, solo se ha puesto en marcha la solicitud del “bono 2” para las pymes españolas, con un importe máximo de subvención de 1.000 euros por empresa. Con este dinero podrán cubrirse el 75% de las acciones relacionadas con las marcas, los dibujos y los modelos.

Según explicó la abogada experta en Propiedad Intelectual del despacho de abogados Legal&Arts, Carlota Fernández Mendoza, registrar una marca en la Unión Europea tiene un coste de 850 euros como tasa base, y a partir de la segunda clase de productos o servicios que se quiera registrar, son 50 euros adicionales.
La nueva campaña, que comenzó el pasado 23 de enero, permanecerá abierta hasta el próximo 8 de diciembre de 2023. Solamente podrán acceder a estas ayudas económicas las empresas de la Unión Europea que cumplan la definición oficial de pyme.

La probabilidad de sobrevivir se reduce un 34% si se vulnera la propiedad intelectual

El pasado 31 de enero, la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) publicaron el informe “Riesgos del comercio ilícito de falsificaciones para las pequeñas y medianas empresas”, un estudio sobre el impacto de la vulneración de los derechos de propiedad intelectual en las pequeñas y medianas empresas.

Tal y como explicaron, la investigación, que por primera vez se centra en las pequeñas empresas, “ofrece nuevas perspectivas sobre el impacto que la falsificación y otros tipos de vulneración de los derechos de propiedad intelectual que tienen las pymes”.

La exposición de logotipos, diseños y marcas en Internet aumenta el peligro de plagio y utilización de señas de identidad sin autorización.
Una de las principales conclusiones de dicho informe es que las pymes cuya propiedad intelectual se vulnera “tienen menos probabilidad -un 34% menos- de sobrevivir al cabo de cinco años. “Este problema afecta especialmente a las pymes independientes que no forman parte de un grupo empresarial de mayores dimensiones y a las que sufren vulneraciones relativas a las patentes”, explicaron desde la EUIPO.

Cabe destacar que las patentes son los derechos de propiedad intelectual que protegen las innovaciones de la forma más directa. Por tanto, según la EUIPO, “los ataques a las patentes son especialmente peligrosos para la economía en general y para las pymes en particular”.

Un 15% de las pymes titulares de un derecho de propiedad intelectual han sufrido alguna vulneración

Según el último barómetro sobre las pymes de la EUIPO, que fue publicado en septiembre de 2022, las pymes que han sufrido vulneraciones de los derechos de propiedad intelectual “consideran que esto ha afectado negativamente a su actividad, y que ha supuesto una merma de su volumen de negocio, reputación, imagen y ventaja competitiva”.

“El hecho de que una pyme vea vulnerada su propiedad intelectual, puede generar, sobre todo, un riesgo de confusión en el público. Puede ocurrir, por ejemplo, que una persona no recuerde el nombre exacto de una marca, pero sí recuerde el logo. Si encuentra un producto con un logo similar, creerá que es el mismo y seguramente lo compre, pensando que era el que quería. Eso puede ocurrir simplemente por el hecho de que los logos o los etiquetados sean muy parecidos visualmente”, explicó la abogada experta en Propiedad Intelectual del despacho de abogados Legal&Arts, Carlota Fernández Mendoza.

Según la abogada, puede suceder lo mismo por la similitud del nombre. “Por ejemplo, vulneran tu propiedad intelectual cambiando una letra del nombre de tu marca o empresa. Quizás una persona que no esté muy habituada a comprar en tu tienda, piensa que es la misma y termina comprando en la otra, haciendo que pierdas consumidores que, en realidad, querían comprarte a ti”, explicó. Asimismo, la vulneración de la propiedad intelectual puede afectar a nivel reputacional, ya que “si ponen un nombre similar al tuyo, pueden generar ventas gracias a tu reputación, simplemente por tener un nombre parecido al tuyo”.

La EUIPO envía una notificación si se han vulnerado los derechos de propiedad intelectual

Sin embargo, el 40% de las pequeñas y medianas empresas reconocen que no realizan un seguimiento de los mercados para detectar posibles vulneraciones de sus derechos de propiedad intelectual, o solo se basan en información aleatoria sobre vulneraciones, como los comentarios de los clientes o la información facilitada por sus socios comerciales.

“En la EUIPO, cuando tu registras tu marca, tienen unos mecanismos internos, de forma que, cuando existe una tercera marca que presenta una solicitud de una marca que es similar a la tuya o que existe una similitud en un grado alto, te envía una notificación directamente explicando que ha existido esa presentación de esa solicitud de marca y se te informa de que puedes presentar una oposición. Ya tu analizas y decides si quieres presentar una oposición, para lo que tienes un periodo de dos meses. Esa es la forma más efectiva y la que nuestros clientes utilizan para saber si un tercero va a intentar registrar una marca parecida a la tuya”, explicó la abogada Carlota Fernández Mendoza.

“Enterarse por otros mecanismos es prácticamente inviable, a no ser que te enteres porque alguien te haya contado que haya otra marca parecida a la tuya, pero si no existe una solicitud como tal en la EUIPO, por el simple uso es muy difícil saberlo. Las grandes empresas y los grandes despachos de abogados tienen perfiles que se dedican exclusivamente a eso, a detectar si alguna marca está vulnerando su propiedad intelectual”, concluyó.

Cabe destacar que, el 15% de las pymes que son titulares de un derecho de propiedad intelectual registrado han sufrido alguna vulneración de los derechos de propiedad intelectual. Dicho porcentaje incrementa entre las pymes que han presentado innovaciones, hasta el 19,4%.

En palabras de la EUIPO, la vulneración de los derechos de propiedad intelectual es, por tanto, “un problema especial para las pequeñas empresas que innovan y crean empleo y crecimiento”.

China se posiciona como el país con mayor fuente de falsificaciones

El informe presentado por la EUIPO y la OCDE analiza también los países de origen de los productos falsificados que vulneran la propiedad intelectual de las pequeñas empresas. En concreto, los datos presentados por la Unión Europea confirman que China es, “con diferencia”, la mayor fuente de falsificaciones, representando el 85% de las incautaciones relacionadas con las ventas online y el 51% de las incautaciones mundiales de ventas en tiendas físicas.

Según el informe “Riesgos del comercio ilícito de falsificaciones para las pequeñas y medianas empresas”, los falsificadores se centran en todos los tipos de productos producidos por las pequeñas y medianas empresas. Los productos afectados con mayor frecuencia son la maquinaria eléctrica y los productos electrónicos (30% de las incautaciones); las prendas de vestir (18%); productos de cosmética y perfumería (10%); y los juegos y juguetes (10%).

“En lo que refiere al método utilizado, alrededor de la mitad de los productos falsificados que vulneraban los derechos de propiedad intelectual de las pymes incautados en las fronteras de la Unión Europea se compraron en línea”.

Fuente: Autónomos y Emprendedor