La brecha digital se reduce y la pyme se digitaliza con las ayudas del Kit Digital

Si hablamos de Internet en las empresas debemos mencionar un concepto que crece proporcionalmente a la inversión digital de las grandes compañías: la brecha digital. En el Día de Internet que se celebra este mes, la tecnológica española Cosmomedia analiza la situación actual de brecha digital que tiene la pyme y las perspectivas de impulso digitalizador para este 2022 y 2023. Desde 1969, cada 17 de mayo se celebra el Día de Internet, aunque poco tiene que ver el contexto de las telecomunicaciones de antes y el de ahora. En la presumible recta final de la pandemia, el comienzo de una crisis energética y en el contexto de una revolución digital sin precedentes, las empresas españolas han apostado por Internet como vehículo general de su actividad empresarial, aunque con claras diferencias según su tamaño.

Internet, sí, pero la micropyme se resiste

Si algo ha demostrado Internet en estos últimos años es que puede literalmente ser el salvavidas de muchas pymes, cuando todo lo demás falla. A pesar de esa utilidad práctica más que evidente, lo cierto es que el uso de tecnologías digitales entre pequeños y grandes negocios sigue siendo muy desigual; la superdigitalización avanza, pero a distinta velocidad según el tamaño de cada negocio. Mientras que el 78% de las pymes más grandes tienen web, en los últimos años ha disminuido el número de empresas de menos de 10 empleados que tienen Internet y página web pasando, del 31% en 2016 al 28% en 2021, según datos del INE en su encuesta sobre el uso de las TIC en las empresas.

Además, desde Cosmomedia apuntan que “muchos negocios mantienen el viejo concepto de web como tarjeta de presentación, sin aprovechar al máximo las potencialidades que una página web dinámica puede aportarles”, indica su director José Manuel Fuentes.

De la página estática a la web activa

Una presencia digital es el pilar fundamental que puede permitir que un negocio local explore nuevas áreas y públicos. De hecho, tal es la importancia de la visibilidad en Internet que literalmente puede condicionar toda la actividad empresarial. «La clave de estar en Internet es saber buscar la diferenciación y ese hueco digital todavía sin explotar», señala Silvia Fernández, especialista en marketing digital de la compañía. En la diferenciación está la clave para asentarse en Internet.

La diferencia te hace referente en Internet

Aquellos negocios que exploran en Internet, buscando esa parcela que no tiene nadie, consiguen posicionarse como referencia, superando su zona de actuación y alcanzando un mercado más amplio. Ya lo decía Bill Gates, «Internet se está convirtiendo en la plaza del pueblo de la aldea global del mañana»“Creemos que el concepto Web ha cambiado por completo. No estamos hablando de una web de presentación, ahora las páginas deben ser dinámicas, activas, que sean un vehículo comercial, una forma de venta y de conexión y comunicación de las empresas con sus clientes”, indica José Manuel Fuentes, CEO de Cosmomedia.

La brecha digital permanece en los nuevos servicios TIC

Las empresas grandes empiezan a incorporar los nuevos servicios digitales a su actividad, mientras que su presencia en la pyme es un hecho casi anecdótico. Cloud computing, big data, IA… las nuevas TIC se resisten a penetrar en el mercado empresarial, una tendencia que según refleja la “Radiografía de Intereses de la Pyme frente a las Soluciones del Programa Kit Digital”, todo hace indicar que perdurará en 2022 y 2023. Este informe refleja que las soluciones de inteligencia empresarial y analítica o de oficinas virtuales están a la cola de interés para la micropyme y el autónomo. Sólo un 15% aproximadamente estarían dispuestos a canalizar las ayudas a la digitalización en esta clase de servicios, frente al 60% que usarían el Kit para la creación de una web.

Si hablamos de tecnologías emergentes, el cloud computing ha crecido entre las grandes empresas casi 9 puntos respecto al 2016, llegando al 28,2% en 2020, mientras que en las microempresas todavía no supera el 10%. Además, en el uso del big data, sólo el 8,5% de 10 o más empleados apuestan por el análisis de datos y en el caso de las micropymes, la cifra se queda en un anecdótico 3%.

El comercio electrónico se duplica en las pequeñas empresas

Aunque la brecha continua, las micropymes que venden por Internet se han duplicado en los cinco últimos años, pasando del 4,2% en 2016 al 9,5% en 2020, colocándose todavía muy lejos del 20,1% de las grandes empresas, donde también ha crecido 6 puntos en los últimos años. La necesidad de canalizar las ventas online frente a la coyuntura de la pandemia ha permitido que muchas pymes apuesten por abrir una tienda online que les permita seguir vendiendo sin necesidad de comercio físico. De hecho, también ha aumentado el número de negocios plenamente ecommerce, que no cuentan con sede física, más allá de un almacén o taller o domicilio fiscal.

Las redes sociales siguen creciendo entre las empresas

Independientemente de su tamaño, las pequeñas y medianas empresas han apostado por utilizar las redes sociales a nivel empresarial. Las más pequeñas, han pasado del 31% al 35%, mientras que, en las pymes de más de 10 empleados, el crecimiento en 5 años ha pasado del del 50% al 67%, respectivamente.

«Lo cierto es que la pyme está en redes sociales, pero todavía tiene que profesionalizar su presencia social, con herramientas que le ayuden a optimizar su tiempo de gestión y a publicar y programar el contenido en redes sociales» comenta Laura Pérez, especialista Social Media de Cosmomedia y agrega: «por la falta de tiempo, de recursos o de conocimientos, muchas veces no actualizan o lo hacen con contenido poco variado, que no conecta con sus seguidores».

Precisamente, las nuevas aplicaciones y herramientas digitales están democratizando este uso tecnológico, simplificando la gestión de redes sociales con plataformas, que crean el contenido y lo publican directamente en cada red social.

Fuente: Ticpymes