Just Eat, la comida a domicilio de los 6.000 millones de euros

En 2001 pedir comida a domicilio significaba llamar por teléfono al restaurante chino del barrio o a la conocida cadena de pizzerías que dejaba su publicidad en el buzón. Pero la historia estaba a punto de cambiar. Cinco emprendedores vieron una oportunidad en el mercado del reparto de comida y decidieron lanzar Just Eat, una pequeña start up que comenzaría su andadura aquel año en Dinamarca. Era el inicio del que 17 años más tarde se ha convertido en un gigante del sector con presencia en 13 países y una valoración de más de 5.500 millones de libras (6.100 millones de euros).

Just Eat se define a sí misma como «una plataforma online (aplicación y web) que pone en contacto a los amantes de la comida con los restaurantes que quieren expandir su oferta gastronómica más allá de las puertas de su local». La compañía apostó por la transformación digital, sustituyendo la tradicional llamada telefónica por un sistema online en el que el comensal se pone en contacto con el restaurante, hace su pedido y paga mediante la plataforma en Internet. Una buena idea que fue creciendo poco a poco a golpe de inversiones y adquisiciones.

Desde su lanzamiento a principios de siglo hasta su salida a Bolsa en 2014, Just Eat protagonizó varias rondas de inversión lideradas por conocidas firmas de capital riesgo. En 2006 inició su expansión internacional aterrizando en Reino Unido, adonde se trasladó todo el equipo y se instalaron las oficinas centrales de la compañía. Poco después comenzaría a operar en Países Bajos (2007) e Irlanda (2008), lo que le permitió recibir una inversión de 10,5 millones de libras (11,7 millones de euros) por parte de Index Ventures, que previamente había confiado en Skype y Last.fm, para impulsar su expansión en nuevos mercados.

Fuente: Expansión