«Existe gran actividad emprendedora en España, soy muy optimista»

Marco Annunziata tiene una visión privilegiada de la crisis. Este economista italiano, apasionado de la tecnología como dejó claro en una de las charlas de TED, agrupa la experiencia de su paso por grandes instituciones internacionales (Fondo Monetario Internacional) con su bagaje del sector privado (Deutsche Bank). En la actualidad, combina las dos al más alto nivel, al ser el economista jefe de General Electric y miembro del Consejo en la sombra del Banco Central Europeo.

A pesar de no cumplir con su esfuerzo fiscal, Francia e Italia han sido ‘perdonadas’ ¿Un gesto inteligente para no ahogar el crecimiento, o un paso peligroso que puede minar la credibilidad de la regla fiscal?

Es una buena decisión. Sin duda, las reglas fiscales son importantes para asegurar la sostenibilidad fiscal, pero también lo son las reformas estructurales. Dado que Francia e Italia se están moviendo en la dirección correcta, un poco de flexibilidad en los objetivos fiscales hará más fácil que estos países continúen con su agenda de reformas. Además es un buen intercambio, porque se ofrece una flexibilidad moderada, sin abandonar la regla.

¿No supone un agravio comparativo respecto a la dureza mostrada con los votantes griegos?

No creo que haya habido dos posiciones diferentes. Las instituciones europeas han dejado la puerta abierta a algún tipo de flexibilidad con Grecia. Esto podría suponer alguna reducción del objetivo de superávit primario para Atenas. Por otra parte, el mensaje de que las reformas y los objetivos del programa de rescate actual tienen que continuar me parece no solo muy importante sino el correcto. Las tres instituciones se han encontrado un Gobierno griego que quería abandonar lo acordado y cortar la comunicación con ellas. Además, el problema de Grecia es mayor…

¿Político?

También. Desde el punto de vista político, el problema es la distancia creada entre las promesas hechas a los votantes por parte del nuevo gobierno de Alexis Tsipras y el compromiso pragmático que se puede alcanzar con las instituciones, y que ilustró el acuerdo con el Eurogrupo de este mes. Syriza llegó al poder prometiendo algunas cosas claramente incompatibles con el acuerdo de rescate actual. Y eso necesita resolverse de alguna manera.

¿Se está preparando General Electric para una salida de Grecia del euro?

No. Lo que hemos visto hasta ahora en las discusiones entre Grecia y la UE confirma que hay un compromiso político muy fuerte para mantener al país en la eurozona. También confirma que el Gobierno griego quiere permanecer en el euro, como la propia población griega. Ese es nuestro escenario.

La Comisión revisó recientemente al alza sus previsiones económicas para los próximos dos años. ¿Comparte su moderado optimismo?

Si, en general soy optimista. Creo que este año y parte del que viene los riesgos van a estar más al alza, gracias a un euro débil, la compra de bonos del BCE y el abaratamiento del petróleo. Todos estos factores sobrepasan el peligro que pueda proceder de las tensiones entre Ucrania y Rusia, o de Grecia, donde además el contagio visto hasta ahora ha sido casi nulo. Sin embargo, eso no significa que vayamos a crecer con tasas del 3%.

España es uno de los países con unas perspectivas más brillantes. ¿También comparten aquí ese optimismo o puede quedar todo en un espejismo?

Soy muy optimista respecto a España. El anterior milagro español tuvo lo mismo de milagro que de burbuja. En este tiempo desde que la burbuja inmobiliaria estallara, hemos visto un gran esfuerzo para ajustar la economía y también para emprender reformas estructurales. Nuevas empresas están surgiendo y la competitividad está aumentando. Existe una gran actividad emprendedora en España, soy muy optimista.

Sin embargo, no parece que España tenga hasta ahora un modelo de crecimiento claro que sustituya al que pivotó sobre el mercado inmobiliario. ¿Puede ser sostenible este crecimiento?

No estoy de acuerdo. España sí que está desarrollando ahora un modelo de crecimiento Está basado en el emprendimiento, en el aumento de start-ups, en un modelo más flexible, basado también en la reforma del mercado laboral, un sistema más europeo. No creo que se necesite una estrategia de crecimiento en la que se deba tener en mente unos sectores específicos.

Otro de los factores mencionados que pueden ayudar al crecimiento en Europa es el paquete de inversión europeo. ¿Cree que será significativo su impacto?

Dependerá de su aplicación. El presidente de la Comisión, Jean-Claude Juncker, está mirando tanto al crecimiento a corto como al medio plazo, apoyándose en reformas para desplegar el estímulo fiscal?

Aunque la atención esté puesta en conseguir el apoyo del sector financiero y los inversores institucionales. ¿Se plantea General Electric contribuir de alguna forma?

Necesitamos verlo, pero si puede ayudar a nuestra perspectiva en Europa colaboraremos. Somos casi tanto una empresa europea como estadounidense.

¿Cree que tiene algunos fallos el plan de inversión?

Necesita estar muy focalizado. Es mejor concentrarse en una serie de áreas clave en lugar de repartir el dinero en muchos campos.

Fuente: El Economista (05/03/2015)