Cómo puede ayudar el Cloud Computing a la crisis

El cambio provocado por Internet está encima de nosotros (y además coincide con una brutal crisis económica donde, por cierto, la información también ha jugado un papel clave), el cambio genera oportunidades para todos aquellos que sepan ser capaces de identificar los rasgos del mundo que nace, no para aquellos que se queden mirando melancólicos las cosas que van a verse transformadas.

El mundo que viene, una modernidad plana y líquida, estará fundamentalmente definido por esa revolución que es Internet (y su última encarnación, el Cloud), por la información que esta genera y los cambios que esto va a provocar en nuestra economía y nuestra sociedad.

Información, Internet, Economía y Sociedad.

Hace poco Yahoo ha nombrado a Scott Thompson nuevo CEO, buscando recuperar el brillo perdido y la rentabilidad para sus accionistas. El ex-CEO de PayPal (como ya sabía su antecesora Carol Bratz) tratará de aprovechar la enorme cantidad de datos que genera ese envejecido gigante de Internet para devolverle algo del brillo perdido, y me gustaría tomar Yahoo, empresa a la que tengo cierto cariño, como punto de partida para reflexionar sobre la importancia de la información y de Internet en las corrientes de fondo que están transformando drásticamente nuestro mundo.

Al fin y al cabo muchas de las empresas que están teniendo una mayor influencia sobre (estoy pensando lógicamente en Google, Facebook, Twitter, etc..) tienen modelos de negocio construidos en torno a la importancia de la información. La importancia de tener mucha y muy organizada información. Y es que vivimos en un mundo que, no sólo genera cada vez más información (actualmente se estima que la información generada generada por la humanidad se duplica cada 18-24 meses), sino en la que además esa información es cada vez más importante, en las empresas, en los mercados financieros, en el control de los presupuestos de los estados, en nuestra vida personal…

En el nacimiento de Internet, se hablaba mucho de como iba a transformar el mundo en el que vivimos radicalmente (quien no recuerda la expresión “La aldea global”) y, curiosamente, ahora que tenemos este cambio encima de nosotros (imposible desligar de Internet la primavera árabe, las convulsiones económicas globales o la transformación social y profesional en la que está inmersa la juventud) apenas se habla de ello. Internet, ahora con el último nombre que le hemos puesto “La Nube” (nombre, por cierto, mucho más metafórico, orgánico y atractivo) están encima de nosotros como una enorme revolución en la historia de la humanidad transformando (o triturando) formas de pensar (mirad a un joven de veinte años enfrentado a la burocracia y entenderéis lo que quiero decir), empresas (innumerables), estados (primavera árabe, lo que le queda a China por delante), la geopolítica (donde compite en importancia con los recursos energéticos), etc…

Internet y las plataformas de Cloud Computing (es decir, una informática centrada en la red, pensada para la gran escala y para la ubicuidad) son, obviamente, los grandes responsables de ese crecimiento acelerado en la cantidad y la importancia de los datos, y ser conscientes de esto abre muchas oportunidades para los individuos, las empresas y los estados, sobre todo ahora que tan hartos estamos de escuchar la palabra crisis, con la parálisis que ello conlleva, me gustaría poner algunos ejemplos:

A nivel de los estados (y en España hay un buen ejemplo de oportunidad) los ciudadanos deberíamos exigir que los datos públicos estén disponibles de forma sencilla y accesible para todo el mundo. La información pública, organizada en una plataforma cloud bien diseñada, permitiría aumentar la transparencia de nuestro sistema social, aumentar la calidad democrática, abrir oportunidades profesionales y empresariales y aumentar el bienestar de todos.

Para las personas, me gustaría citar el empleo. Tanto en entornos de alto desempleo como el español, como entornos de grandes cambios como los países emergentes, internet y la sociedad de la información que genera, cambian las reglas del juego y permiten (sobre todo a los nativos digitales) abordar su vida profesional de forma mucho más flexible siguiendo el paradigma del “jobless work”, el freelance multisectorial, que quizá puede aportar menos seguridad (ficticia muchas veces) y ser mucho más enriquecedor permitiendo llevar una vida más productiva, equilibrada y feliz.

A nivel empresarial, son centenares las oportunidades de negocio, oportunidades para mejorar como se hacen las cosas, que aparecen en un mundo con cambios tan potentes en marcha. El auge del eCommerce, el colapso de los medios tradicionales, la importancia del Big Data o de las redes sociales, la creciente complejidad de la logística global, las nuevas necesidades de ocio de los ciudadanos, son algunos ámbitos que se me ocurren (y seguro que mucha gente puede citar muchos) en los que con un poco de imaginación y ganas muchas empresas, jóvenes o maduras, pueden encontrar grandes oportunidades para innovar y competir. Como por ejemplo, las posibilidades y la versatilidad para la gestión que ofrece el Cloud Computing Business Intelligence, como es el caso de nuestra plataforma de LITEBI.

El cambio provocado por Internet está encima de nosotros (y además coincide con una brutal crisis económica donde, por cierto, la información también ha jugado un papel clave), el cambio genera oportunidades para todos aquellos que sepan ser capaces de identificar los rasgos del mundo que nace, no para aquellos que se queden mirando melancólicos las cosas que van a verse transformadas. En mi opinión, el mundo que viene, una modernidad plana y líquida, estará fundamentalmente definido por esa revolución que es Internet (y su última encarnación, el Cloud), por la información que esta genera, y los cambios esto va a provocar en nuestra economía y nuestra sociedad.

Fuente: Negocios y emprendimiento (25/01/2012)