Cerca de mil expertos debatirán la próxima semana en Granada sobre el Medio Ambiente El Parque de las Ciencias acoge el Congreso Europeo de Aerosoles 2012, organizado por la AECTA. La cita tendrá lugar del dos al siete de septiembre.

Granada tiene una cita científica de relevancia internacional. El Parque de las Ciencias acogerá el Congreso Europeo de Aerosoles (EAC-2012), con la asistencia confirmada de cerca de mil expertos procedentes de todas partes del mundo, y organizado por la Asociación Española de Ciencia y Tecnología de Aerosoles (AECTA), y el Grupo de Física de la Atmósfera, que desarrolla su actividad en el Departamento de Física Aplicada y en el Centro Andaluz de Medio Ambiente (CEAMA) de la Universidad de Granada.

La cita tendrá lugar del dos al siete de septiembre.

Este congreso servirá para profundizar en el conocimiento de los aerosoles, considerados como la suspensión de partículas sólidas o líquidas en un medio gaseoso. Los aerosoles se encuentran en el medio ambiente y se generan en procesos industriales para aplicaciones diversas. Pueden tener un origen natural (volcanes, erosión del suelo, pulverización del mar, incendios forestales,…) o antropogénico (emisiones de tráfico, procesos de quema de combustibles fósiles, actividades industriales,…). Sus efectos son relevantes en los procesos de formación de nubes y la lluvia, la calidad del aire o la salud, así como en la transmisión de la radiación solar a través de la atmósfera. En concentraciones elevadas, por ejemplo en episodios de calima, reducen la visibilidad. Además, los aerosoles ejercen una marcada influencia sobre el clima. En este sentido, hay que resaltar que en las previsiones de cambio climático originado por el hombre, el aerosol representa una de las mayores fuentes de incertidumbre, por lo que se hace necesario profundizar en su estudio.

Un ejemplo significativo de la repercusión que pueden alcanzar estos aerosoles fue la llamada “nube de ceniza” provocada por el volcán islandés Eyjafjallajökul, que paralizó el tráfico aéreo y que causó grandes pérdidas económicas. Más reciente aún, el accidente de la central nuclear de Fukushima, que generó aerosoles de material radiactivo. Los numerosos episodios de calima durante el verano son consecuencia de las invasiones de polvo sahariano, frecuentes en los meses cálidos. Todos estos ejemplos demuestranla necesidad de abordar el tema con el máximo rigor científico, puesto que son muchas las repercusiones económicas, sociales y sanitarias que se derivan de él.

El Congreso servirá para dar a conocer las investigaciones más recientes en diversos ámbitos del aerosol atmosférico, desde estudios de generación de nanopartículas para fines industriales, hasta la caracterización del aerosol atmosférico con las más diversas herramientas, sin olvidar los aspectos relativos a su impacto sobre la salud, el medio ambiente y el clima.

A lo largo la próxima semana, se desarrollarán diversas ponencias orales y presentación de pósters, que serán precedidas por cinco sesiones plenarias, a cargo de investigadores de relevancia internacional. Estas plenarias, que abordarán temas de relevancia dentro del ámbito del aerosol, estarán a cargo de expertos internacionales como el Dr. Vincent Castranova, del US Departament of Health & Human Services, la profesora Ulrike Lohman, del Atmospheric and climate Science de la ETH en Zurich, la Dra. Gelsomina Pappalardo, del CNR-IMAA italiano, coordinadora de la red de lidares europeos EARLINET y de la red de observación europea ACTRIS, la Dra. Barbara Turpin, de la Universidad de Rutgers (New Jersey), y el profesor Helmuth Horvath de la Universidad de Viena, que cuenta en su haber con una dilatada carrera en el estudio experimental del aerosol atmosférico. El debate científico y el intercambio de ideas presidirán las sesiones de trabajo, en las que se cuenta con una nutrida participación de jóvenes investigadores.

Junto a todo esto, se desarrollarán reuniones de organismos internacionales encargados de la vigilancia de la calidad del aire, cuyas directrices, que son desarrolladas en las normas de legislación medioambiental, se fundamentan en los estudios científicos recientes.

Fuente: La Opinión de Granada (29/08/2012)