La economía social como palanca hacia el desarrollo La cooperativa Covirán formará a más de 1.000 socios y empleados en el primer año de actividad de su nueva Escuela de Comercio.

En la clausura de las bodas de oro de la cooperativa granadina Covirán -hace ahora tres años-, el presidente de la citada corporación empresarial, Luis Osuna, aseguró que «los mejores momentos estaban por llegar». Ayer se cumplió uno de esos sueños. La firma presentó en su establecimiento insignia de la plaza de la Ilusión en la capital, la Escuela de Comercio Covirán.

Un novedoso proyecto que «mejorará la cualificación de sus socios y trabajadores». De este modo, el grupo persigue cuidar el capital humano. La idea es formar a los asociados en áreas como la distribución y la atención personal en los establecimientos para generar valor añadido en el trato a la clientela.

A través de la gestión de la Fundación Covirán, esta cooperativa estima que este año se impartirán más de 15 programas didácticos que superarán las 2.100 horas de formación. Más de un millar de alumnos pasarán por las aulas con las que cuenta este servicio.

Al acto de inauguración asistieron el alcalde de Granada, José Torres Hurtado, y la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, entre otros representantes de la administración autonómica en la provincia y de la capital.

La responsable del Ejecutivo andaluz destacó la apuesta que desde Covirán se hace «por la economía social y el cooperativismo». Díaz se felicitó por el paso dado al frente por esta amalgama de empresarios con el fin de «abrir fronteras».

En su más de medio siglo de vida, la cooperativa granadina cuenta con más de 3.200 supermercados repartidos por España y Portugal, siendo un referente en la distribución. Gracias a ese carácter internacional, la presidenta calificó a Covirán como «un ejemplo de lo que somos capaces de hacer en Andalucía, dentro de nuestra tierra y fuera de ella».

Por su parte, el regidor de la ciudad de la Alhambra alabó esta iniciativa «completísima» al cubrir un amplio abanico de necesidades en el barrio y, a la vez, generar «muchísimos empleos en aquellas zonas donde más falta hace». Son muchos los municipios españoles que ya cuentan con al menos un supermercado en sus calles.

Hay que recordar que esta organización empresarial se ha convertido en la primera cooperativa de detallistas de alimentación en la Península Ibérica. Las ganas de crecer no se quedarán en esa esfera.

Según anunció el presidente de Covirán y consejero delegado del grupo, «seguramente en un futuro estaremos en muchos otros sitios porque la vocación de nuestro modelo es crecer y seguir incorporando socios y ayudando a todos esos empresarios a que sus negocios sean cada vez más rentables y profesionales».

Detrás de este proyecto hay más de 2.800 socios cooperativistas en cuyos establecimientos trabajan 16.000 personas «que queremos que pasen por aquí, socios y trabajadores, que se formen en nuestra escuela. Eso para nosotros va a ser un antes y un después», indicó Osuna.

De hecho, la Escuela de Comercio nace con la intención de evolucionar en sus prestaciones. Aunque en una primera fase atenderá a la familia Covirán, la organización pretende en el futuro formar a profesionales en el ámbito de la distribución y de los supermercados. «Incorporaremos a la sociedad, dándole la oportunidad de conseguir certificaciones» laborales. Cobrarán especial protagonismo los colectivos «más desfavorecidos» a los que se intentará «facilitar su incorporación al mundo laboral».

Este centro formativo es «la materialización» de la apuesta de este grupo empresarial de origen andaluz por la formación como «palanca estratégica» para lograr una cualificación «excelente» de sus socios y trabajadores, muestra «indispensable para una gestión óptima de los negocios que promueva la diferenciación».

Dentro de las bondades que presenta este complejo hay que resaltar que cuenta con el marchamo de Aenor en lo que respecta a la accesibilidad universal. «Una persona con discapacidad puede acceder a los mismos servicios que cualquier otra persona».

Con una inversión de 7 millones de euros, ya se han creado 50 puestos de trabajo en un año de vida, a los que en breve se sumarán más. Las instalaciones se distribuyen en un solar de 8.000 metros cuadrados. En una parte de estos se encuentra la Escuela de Comercio, una oferta que se completa con un supermercado de 1.000 metros cuadrados, un parking subterráneo y pistas deportivas (de pádel y tenis).

Esto permite las sinergias entre unas áreas y otras. Osuna apostó por «fomentar todos esos hábitos saludables que pensamos que hoy en día es una demanda de nuestros consumidores, por eso está unida esta escuela a la parte de salud y ocio».

Fuente: Granada Hoy (25/04/2014)