Black Friday, ensayo general para la campaña navideña

La importación de tradiciones del otro lado del Atlántico no siempre es bien recibida por los ‘puristas’, pero Granada ha dado la bienvenida con los brazos abiertos el Black Friday. Tan americano como Halloween, el Día de Acción de Gracias o el tradicional indulto presidencial al pavo propio de esta fiesta, que se celebra el último jueves de cada mes, pocas voces se levantan contra una tradición puramente comercial, que da el pistoletazo de salida a la campaña de Navidad y que ‘levanta’ la cuenta de resultados de un mes de noviembre tradicionalmente flojo en ventas.

Aunque el año pasado ya hubo quien coqueteó con el viernes negro -las teorías sobre el origen de este nombre son diversas, pero una de las leyendas apunta a que en este día se pasa de los números rojos a los negros de los beneficios-, este ha sido el ejercicio en el que el Black Friday se ha implantado con fuerza en Granada. No sólo han importado esta tradición las grandes cadenas y franquicias, sino también el pequeño y mediano comercio, dispuesto a beneficiarse de la festividad del consumo por antonomasia, del ensayo general para la campaña navideña. Los descuentos, además, no se encontraban sólo en el centro. El comercio de los barrios también se ha sumado a esta iniciativa, que en la mayoría de los casos se alargará durante todo el fin de semana.

Puede que se desconozca su origen y que el nombre suene a ‘chino’ a muchos consumidores, pero nadie es ajeno al atractivo de un enorme porcentaje asociado a un signo negativo. Ayer los comercios granadinos amanecieron con grandes carteles en los se anunciaba la jornada de descuentos, en los que los compradores pudieron encontrar rebajas de entre el 15 y el 50%. La mañana comenzó algo más tranquila, teniendo en cuenta que se trataba de una jornada laboral, pero a medida que se acercaba el mediodía las calles comenzaron a llenarse y las tiendas empezaron a experimentar en primera personas las ventajas de este viernes negro, que también tiene un enorme tirón en el comercio online.

Este año la implicación del sector en el Black Friday ha sido masiva. Los cálculos de la Confederación Empresarial de Comercio de Andalucía (CECA) apuntan a que más de la mitad de los establecimientos se unieron ayer a la campaña de descuentos, que comenzó a introducirse en la comunidad autónoma tras la liberalización del periodo de rebajas.

Desde la Federación Provincial de Comercio aseguraron que este año se ha realizado una importante campaña de información entre los comerciantes, difundiendo las ventajas de esta jornada de compras. «Será una americanada, pero todas las iniciativas que hagan que haya más ventas, bienvenidas sean», indicaron ayer fuentes de la Federación, que confirmaron que este ha sido el primer año en el que el Black Friday ha contado con tanto nivel de aceptación.

Solo en la capital, de hecho, había más de 150 pequeños y medianos comercios -dejando a un lado a las grandes franquicias, mucho más acostumbradas a importar tradiciones y a sorprender a sus clientes con descuentos fuera de la campaña de rebajas tradicional- que se sumaron con ganas al Black Friday.

El gerente del Centro Comercial Abierto, Christian Carbajosa, explicó ayer que el fin de semana de descuentos ha tenido una excelente aceptación entre comerciantes y, por supuesto, consumidores. «En el peor de los casos los comercios están duplicando la facturación con respecto a la del año pasado», explicó Carbajosa, que apuntó que en 2014 el seguimiento del Black Friday en el comercio tradicional fue muy «aislado», pero que este año se ha hecho de forma «coordinada». Y, por lo tanto, mucho más exitosa. «Le hemos ganado la partida a los centros comerciales. La gran movilización de gente se está produciendo en la ciudad», apuntó el gerente del Centro Abierto.

Las ventajas de apuntarse al Black Friday son numerosas. Por un lado, se da salida al estocaje de productos y, por otro, se adelantan las compras navideñas. De hecho, el Centro Abierto apunta que algunos estudios confirman que un 32% de las compras que se realizan con vistas a la Navidad se realizan semanas antes de las fiestas. Y el Black Friday, a partir de ahora, será sin duda la jornada de referencia para comerciantes y consumidores. Carbajosa explica que el viernes negro -seguido en la mayoría de un Black Saturday que prolongará la campaña una jornada más- «no solo sirve para revitalizar el consumo, sino que ayudan también a los comercios a levantar la facturación».

A pocas semanas de la Navidad, el Black Friday se ha convertido en el momento ideal para ‘pedir’ a Papá Noel o a los Reyes los juguetes de los más pequeños. Por ejemplo, Toysrus ofreció ayer descuentos de hasta el 50% en productos seleccionados, mientras que Juguetilandia optó por el 70% de descuento en la segunda unidad.

El viernes negro se ha impuesto en las calles, pero también en el comercio online. El gigante Amazon, por ejemplo, lleva toda la semana ofreciendo descuentos, y ayer lanzó 150 nuevas ofertas cada hora, unas rebajas del 50% con 25 nuevos productos rebajados cada diez minutos.

El comercio online, además, extenderá la campaña hasta el próximo lunes, cuando muchos se sumen al Ciber Monday, otra jornada de descuentos para los consumidores digitales.

Fuente: Ideal (28/11/2015)